Con miras a reforzar la protección de la población y el invaluable patrimonio natural y cultural que alberga el archipiélago de Juan Fernández, por segundo año consecutivo, la Corporación Nacional Forestal (CONAF) conformó una brigada de prevención y combate de incendios forestales en la zona.
La unidad terrestre -denominada “Chonta”, en homenaje a la palma endémica de la isla Robinson Crusoe- inició su labor en la localidad insular el lunes 20 de enero, de acuerdo a la planificación de la institución forestal.
Ésta es la brigada número 32 y la última que constituirá la CONAF en la región de Valparaíso, para el actual período de alta probabilidad de ocurrencia de incendios forestales 2019-2020, que partió el 1 de julio pasado y culminará el 30 de junio de este año.
El director regional de CONAF, Sandro Bruzzone, detalló que “el equipo está compuesto por diez personas, cuatro mujeres y seis hombres, más un profesional de apoyo del Parque Nacional Archipiélago de Juan Fernández, quienes cumplirán labores de difusión educativa, silvicultura preventiva o manejo de combustibles, resguardo de infraestructura crítica y primera respuesta ante incendios forestales”.
En tanto, el jefe de la brigada “Palma 5” (Valparaíso) del organismo forestal, José Flores, destacó que los integrantes de la unidad terrestre “Chonta” recibieron el mismo equipamiento de trabajo y seguridad ocupado en resto de la región y, además, fueron capacitados en torno “al uso y la mantención de herramientas de corte y raspado, y motobombas de agua, para combatir incendios forestales diferentes a los del continente, por los vientos, el tipo de combustible y la topografía”.
Por su parte, el jefe de la Sección de Prevención de Incendios Forestales de la corporación, Daniel Ariz, advirtió que eventuales siniestros forestales podrían generar daños estructurales en el sector poblado San Juan Bautista, en la Isla Robinson Crusoe, ya que en lugar existen “viviendas que están en pleno contacto con lo que fue una plantación que se desarrolló a partir de los años setenta, donde hay muchas especies que se asilvestraron y naturalizaron, como pinos y eucaliptos, algunos de gran envergadura, además de zarzamoras y murtillas”.
Primeras labores
En ese contexto, la labor de la brigada “Chonta” se concentra actualmente en cortar la continuidad de la vegetación en este punto vulnerable y otros cercanos a infraestructura crítica, tales como fuentes de agua potable, líneas de alta tensión y el centro autorizado de acopio de basura.
Otra acción relevante que inició el equipo insular es el contacto directo con la comunidad fernandeciana, para concientizar a los vecinos sobre el peligro que revisten actividades como la quema de desechos domiciliarios y agroforestales, el uso de herramientas que generan chispas, como esmeriles y sopletes, o la acumulación de desperdicios.
El archipiélago de Juan Fernández no está ajeno a la problemática de los incendios forestales. De hecho, en el año 1996, el paso del fuego consumió más de 200 hectáreas en la isla Alejandro Selkirk, afectando a especies de flora y fauna únicas en el mundo.