Tras el estallido social, es prácticamente imposible que los eventos que se realicen en los meses próximos no tengan algún guiño a lo ocurrido en Chile a partir del 18 de octubre. Por eso, los organizadores del Festival de Viña del Mar 2020 han estado más atentos y alertas que en otras ediciones en torno a las rutinas de los humoristas y las alusiones que puedan realizar a autoridades de toda índole, desde el presidente Sebastián Piñera y su gabinete, hasta Carabineros.
En la organización, de alguna forma manera, existe cierto recelo de que cualquier mención a tales entidades pueda significar no sólo una reacción acalorada de parte del público, sino que también una situación que puede ser compleja para el propio evento, como eventuales demandas.
Considerando los anterior, los organizadores han sostenido las habituales reuniones con los representantes de los comediantes para analizar sus libretos y sus performances, encuentros que se hacen todos los años por estas fechas. No obstante, en esta ocasión, los productores del certamen veraniego han puesto acento en dos aspectos: si se menciona una autoridad o una institución, se ha establecido que no se le impute ninguna clase de delito.
Además, se ha puntualizado que, en caso que un humorista se salga de esta petición y ello conlleve alguna clase de consecuencia judicial, el mismo comediante debe hacerse responsable de lo sucedido.
Como antecedente existe el caso de Mon Laferte, quien el año pasado comentó en una entrevista que carabineros y militares habrían estado tras los incendios de las estaciones del metro que iniciaron la crisis, por lo que la primera institución le pidió a la Fiscalía Nacional que la cite a declarar.
Fuente: La Tercera.