Una instancia nacida desde una universidad porteña busca dar un salto internacional, ya que con 120 inscritos en Chile y el mundo, el curso “Reservas de la Biósfera: Modelos de Gestión”, que desarrolla el Departamento Disciplinario de Ciencias Geográficas de la Facultad de Ciencias Naturales y Exactas de la Universidad de Playa Ancha (UPLA), tiene la mirada puesta en ser reconocido como cátedra UNESCO.
El curso, impartido por los académicos Marcelo Leguia Cruz de la UPLA y Andrés Moreira-Muñoz de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso(PUCV), se efectúa por segundo año consecutivo, ahora en versión virtual, como una cooperación entre el Departamento de Ciencias Geográficas de la universidad playanchina y el proyecto Anillos CONICYT SOC180040 “GeoHumanidades y (Bio) Geografías Creativas sobre la Sostenibilidad y la Co-Conservación mediante Inmersión Rizomática” de la PUCV.
La instancia de formación está orientada a la comprensión de la categoría que entrega la UNESCO a territorios de importancia ambiental y cultural a nivel mundial, denominada Reservas de la Biósfera. Junto con ello, busca comprender su denominación, zonificación y gestión, además de potenciar a esta figura como una forma de gestionar el territorio de manera sustentable, incorporando estrategias de desarrollo regional acordes a los instrumentos de planificación vigentes y proyectados para cada territorio.
En el mundo existen 763 Cátedras Unesco. En Chile se identifican 11 en distintas universidades, tanto públicas como privadas. De concretarse el anhelo de la UPLA sería ésta la segunda en la región de Valparaíso, pero la primera en abordar las Reservas de la Biósfera como un modelo de gestión para el desarrollo sustentable.
Cátedras UNESCO
Las Cátedras Unesco responden a una iniciativa de la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura, de la Organización de las Naciones Unidas, que tienen por objetivo avanzar y mejorar el desarrollo de la investigación, capacitación y programas de desarrollo de la educación superior, por medio de la construcción de redes universitarias y del fomento a la cooperación entre universidades mediante la transferencia del conocimiento a través de las fronteras.
El académico UPLA, Marcelo Leguia Cruz, explica la relevancia de alcanzar este estatus una vez que se consolide el curso en esta segunda versión, postulen a la iniciativa y sea seleccionado como tal.
“Significaría ponernos a la par de grandes universidades del mundo. Una oportunidad de ser parte de una red internacional y colaborativa que busca acrecentar el conocimiento y la labor que desarrolla UNESCO y sus programas, en este caso el programa Hombre y Biósfera. Igualmente, los estudiantes se beneficiarían a través de la posibilidad de contar con académicos de otros territorios con realidades distintas, permitiéndoles contrastar la realidad nacional. En ese sentido el curso ya cumple con la premisa de mostrar la universidad al mundo, porque tenemos participantes de Perú, Uruguay, Ecuador y Nicaragua. Además, participan como colaboradores del curso académicos de otras universidades tanto nacionales como internacionales”, sostiene Leguia.
Existe alto interés por abordar las Reservas de la Biósfera como modelo de gestión y por eso los profesores apuntan a mantener el curso por un largo tiempo y una de las formas es obteniendo el reconocimiento como Cátedra UNESCO.
“El proceso no es fácil y lo queremos llevar con cautela para no caer en falsas expectativas, pero creemos que es una muy buena opción. Se puede establecer una Cátedra UNESCO por un periodo inicial de cuatro años, en calidad de nueva unidad de enseñanza e investigación, en una universidad u otro establecimiento de enseñanza superior y/o de investigación”.
Sello distintivo
Una de las características del curso que imparte la UPLA es que es abierto a la comunidad y cuenta con la participación de los protagonistas de las Reservas de la Biósfera, los habitantes del territorio, lo que brinda un sello distintivo al curso y está en línea con la visión de la UPLA en cuanto a ser una institución regional que aporte al desarrollo de los territorios que la componen.
El docente agrega que Chile cuenta con 10 Reservas de la Biósfera (RB), en la Región de Valparaíso se encuentran 2: el Archipiélago Juan Fernández y la RB Campana-Peñuelas, por lo tanto, una cátedra o curso que se imparta desde las bases de una Reserva de la Biósfera adquiere mayor relevancia.