Normalmente, durante el periodo de invierno la cuenta del gasto energético sube, lo que impacta de forma directa a nuestro bolsillo y al medio ambiente. Es por ello, que Lorenzo Ale, jefe de carreras de Electricidad y Electrónica Industrial del Instituto Profesional Santo Tomás, entrega una serie de pautas para cuidar la energía que utilizamos.
El académico explica que las razones de este aumento en la cuenta de la luz se deben a que “en invierno la luz natural del día dura menos y pasamos más tiempo en casa, lo que provoca que encendamos las luces más temprano y utilicemos más los aparatos tecnológicos y de entretención como la televisión, así también necesitamos más calefacción”.
El especialista señala que, con la finalidad de cuidar esta energía, se implementó la tarifa de invierno, “la cual estima que cuando un cliente consume más del promedio normal, se le cobra esa energía adicional a un precio mayor”. Agrega que, para este año, y debido a la pandemia, el sobreprecio se realizará solo en los meses de junio y julio.
Si no quiere que este aumento en la cuenta lo pille desprevenido, tome nota de los siguientes consejos que entrega el experto en electricidad y electrónica:
– Evitar el consumo ocioso o “vampiro”. Este se produce cuando equipos que no están en uso y que pese a estar apagados, continúan enchufados y consumiendo energía. Es el caso de los equipos que quedan en modo de espera o stand by como los televisores o los computadores, por ejemplo. Por ello, no olvide desenchufar todos los aparatos de este tipo que no esté utilizando.
– Cambiar todas las ampolletas del hogar por las de eficiencia energética o de bajo consumo. Si antes consumía electricidad con una ampolleta de 60W o 100W, ahora puede obtener la misma cantidad de luz con ampolletas de 14W o de 7W. Lorenzo Ale expone que con esto se puede lograr un ahorro de un 50 hasta un 80 por ciento en el gasto que se producía por iluminación.
– Al comprar aparatos para el hogar como lavadoras, refrigeradores o cualquier equipo que consuma electricidad, es importante adquirir los que se identifican con A, A+ o A++, que son los más eficientes en el consumo de energía.
– Mientras esté en casa, procure apagar las luces de habitaciones que no estén en uso, ya que de esta forma se disminuye el consumo de energía.
– Prefiera estufas con termostato, de esta manera, se interrumpe la energía cuando la temperatura llega al nivel adecuado.
– Para conseguir una calefacción más eficiente, se puede aislar térmicamente el hogar. Para ello se puede comprar sellos autoadhesivos para puertas y ventanas, esto evita que el frío penetre, o más bien que el calor salga. Por último, al encender la calefacción mantenga cortinas, ventanas y puertas cerradas, dejando eso sí al menos la parte de debajo de las puertas para ventilación.