Las Fiestas Patrias son una fecha para celebrar y disfrutar, pero generalmente se caracterizan por un alto consumo de calorías, principalmente derivadas de carnes, empanadas, bebidas y alcohol.
Durante estos días de celebración, los adultos llegan a subir en promedio tres kilos, debido al exceso de comida y bebida.
Además, como un alto porcentaje de la población es sedentaria, se genera un desequilibrio entre lo que consumimos y la que gastamos. Así lo advierte la nutricionista y académica de la Universidad de Playa Ancha, María José Silva Montenegro, quien enfatiza que muchas veces las personas quieren comer todo lo que pueden, sin escuchar lo que su cuerpo les dice, resultado: molestias gastrointestinales.
“Lo ideal es consumir más calorías durante el día y menos en la tarde- noche, ya que en la noche se gastan menos calorías y además, empeora la calidad del sueño. Por lo tanto, sugiero servir lo que vayamos a comer en un plato, ya que muchas veces la gente se reúne a comer alrededor de la parrilla y eso hace que aumente la ingesta, sin darse cuenta de lo que realmente está comiendo”, dice la profesional.
Agrega que la idea es escoger qué comer a la hora del desayuno u once (por ejemplo, choripán o empanada). Si la persona opta por el choripán, lo recomendable es acompañarlo con pebre en vez de mayonesa y, en el caso de la empanada, preferir de horno en vez de frita.
Para el asado, la nutricionista UPLA recomienda consumir carnes bajas en grasa como pollo sin piel, pavo, lomo liso, filete o posta y acompañar con verduras, las cuales aportan vitaminas, minerales y antioxidantes, que mejoran el sistema inmunológico. Sugiere optar por las ensaladas de hoja verde, ya que contienen menos calorías y aportan fibra que ayudará a mejorar la digestión.
De postre sugiere consumir frutas, sin adicionar azúcar ni cremas. Puede ser un mote con huesillos sin azúcar, y para después del almuerzo, incorporar un té de infusiones digestivas tipo manzanilla o rooibos, en vez de té o café, que son quelantes (una sustancia que forma complejos con iones de metales pesados), que no permiten la absorción de nutrientes.
“Un aspecto igualmente importante es moderar el consumo de bebidas gaseosas y alcohol, ya que son altos en calorías y consumirlas en exceso es un factor de riesgo de numerosas enfermedades. Por ello, es mejor consumir agua, infusiones o en su defecto, bebidas o jugos sin azúcar. Si va a beber alcohol, es preferible una copa de vino o espumante”, concluye María José Silva, quien asegura que para mejorar la digestión y quemar algunas calorías extras, bailar un par de cuecas, siempre será positivo.
En resumen:
-Consumir alimentos en cantidades adecuadas (no comer a destajo).
-Preferir el consumo de carnes blancas como pollo, pavo o cerdo extra magro y controlar el consumo de sal.-Acompañar las carnes con ensaladas, especialmente de color verde (disminuir carbohidratos como papas y arroz).
-Evitar los alimentos fritos y con alto contenido de grasas.
-Consumir suficiente agua (puede ser saborizada con cáscaras de naranja, limón, menta, otros y endulzantes no calóricos).
-Bailar la mayor cantidad de pie de cuecas, posible, o al menos promover las caminatas.