En medio del avance de la variante ómicron del COVID-19 a nivel mundial, lo que ha incrementado los casos de coronavirus y el ingreso de los no vacunados a las unidades intensivas, la Organización Mundial de la Salud (OMS) encabezó una reunión para analizar un tema clave: la inmunidad de rebaño.
Quien encabezó la cita fue Philip Krause, presidente del Grupo de Expertos en Investigación de Vacunas contra el Covid, integrante de la entidad internacional. De hecho, la reunión se llamó: “¿Por qué necesitamos una vacuna contra múltiples coronavirus?”.
Según consignó el diario Clarín, se trató de un cónclave de análisis de la estrategia sanitaria que se ha llevado adelante hasta ahora y la importancia de realizar cambios en la materia. Junto con los especialistas de la OMS participaron distintos académicos de universidades de Estados Unidos, Alemania, Reino Unido, India, Sudáfrica y Brasil, entre otros.
Ciencia versus variantes
De acuerdo al citado medio argentino, presente en la reunión de la OMS, la situación es crítica porque la ciencia y la industria farmacéutica siempre están detrás del COVID-19. Es decir, cuando ya hay una solución para tratar una determinada variante, aparece otra. Y en el caso de ómicron, se trata de una mutación que se propaga rápidamente.
Sin embargo, también se analiza el escenario de un aumento de la inmunidad contra el SARS-CoV-2 en el mundo, tras el paso de ómicron. Esto podría ser el preludio del paso de pandemia a endemia.
Existe la posibilidad de que ómicron mute a una variante más rápida en cuanto a transmisibilidad, por lo que desde la reunión de expertos llamaron a “estar preparados para todas las posibilidades”.
Entonces, ¿cuál es la clave? Adelantarse. ¿Y en qué se traduce? En las vacunas pancoronavirus, que puedan enfrentar cualquier tipo de variante. En términos simples, es esperar a que llegue y responder adecuadamente desde el sistema inmune, en lugar de perseguir a la COVID-19.
“La similitud estructural entre los coronavirus debería permitir el desarrollo de una vacuna pancoronavirus. Podrán surgir nuevas variantes con mayor rapidez que el desarrollo y despliegue de las vacunas específicas de variante. Las respuestas de las células T (de memoria) pueden constituir un importante componente de las vacunas pancoronavirus”, indicaron en la reunión, según cita Clarín.
En esa línea, explicaron que “la disminución de la respuesta a la vacuna de refuerzo indica que no tenemos una vacuna concreta para el futuro. Aunque la enfermedad grave es crítica, una vacuna pancoronavirus podrá tener mejores posibilidades de bloquear la transmisión y facilitar la inmunidad de rebaño, y se espera que sea más duradera”.
De todos modos, los expertos tienen claro que todavía no terminan con el COVID-19. Sin embargo, establecieron un desafío científico frente a las variantes de alta transmisibilidad: llegar primero que el virus.
(Fuente: ADN)