Un grupo de fiscalizadores de la Aduana Regional de Valparaíso junto a efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) decomisaron 51.800 cajetillas de cigarrillos de contrabando que iban a ser vendidos en el comercio ambulante de las comunas de Viña del Mar y Valparaíso.
El decomiso se realizó como resultado del trabajo de inteligencia y análisis de datos realizado entre ambas instituciones, el que permitió detectar el acopio de esta mercancía en un inmueble ubicado en el cerro Forestal de Viña del Mar, las cuales posteriormente eran distribuidas entre el comercio ambultante de la Ciudad Jardín y Valparaíso.
Hasta ese lugar, un domicilio particular y una iglesia evangélica, llegaron funcionarios de la Unidad de Fiscalización de Drogas y Delitos Conexos de la Dirección Regional de Valparaíso y personal de la Brigada Investigadora de Delitos en Recintos Portuarios de la PDI, en el que descubrieron 104 pacas de cigarrillos con 5.180 cartones de diferentes marcas.
En relación al decomiso, el director regional de la Aduana de Valparaíso, Roberto Fernández, explicó que “en base a análisis de inteligencia se pudo detectar este ilícito que se estaba cometiendo. Esta es la operación más importante de lo que llevamos del año y fue gracias a la labor conjunta que tenemos con PDI y el traspaso de información entre ambas instituciones”.
Fernández añadió “que los equipos e inteligencia de la Aduana están trabajando intensamente en base a análisis de riesgo y documentación y eso nos ha dado luces para encontrar estos ilícitos”.
En tanto, el prefecto Roberto Bolvarán, jefe de la Brigada de Delitos Portuarios de Valparaíso, indicó que “se realizó un estudio y análisis de información policial abocado a la internación y comercialización de cigarrillos de contrabando en conjunto con la Aduana de Valparaíso, donde se intervino un domicilio ubicado en la comuna de Viña del Mar, realizando la detención de dos personas adultas, una de ellas de sexo masculino que ya contaba con antecedentes policiales por el delito de contrabando».
Bolvarán indicó que “estas personas utilizaban una capilla evangélica para el acopio de los cigarrillos para, posteriormente, ser distribuidos entre los vendedores ambulantes e Valparaíso. Las personas de la capilla sabían que ocurría esta situación, pero guardaban estas cajas ya que recibían un pago mensual por esto”.
En total, se incautaron 6.600 cajetillas de las marcas Eight Convert Mint Capsule; 17.610 cajetillas de Fox Soft pack; 12.040 cajetillas de Carnival blue; 4.150 cajetillas de Hills Blue y 11.400 cajetillas de Carnival Silver. Todo esto fue avaluado por Aduanas en $110.388.167.
Los cigarrillos hallados son ingresados de contrabando y que, además, no cuentan con las autorizaciones de las autoridades de salud para ser comercializadas en Chile por lo que se desconoce su composición real y los eventuales problemas que puedan causarlas a los consumidores.
Por este hecho fueron detenidos los hermanos A.B.FA. y J.L.F.A. y la mercancía quedó en custodia de la Aduana de Valparaíso.