Por José Ossandón
La Comisión de Derechos Fundamentales de la Convención Constitucional rechazó esta tarde la iniciativa popular de norma “Con mi plata no”, por 18 votos en contra, 8 a favor y 7 abstenciones.
Esta propuesta buscaba que la nueva Carta Magna asegurase los ahorros previsionales de los chilenos, que el Estado asegure la igualdad de ellos entre hombres y mujeres y garantizar una pensión universal.
Su principal objetivo era que los ahorros previsionales y futuras cotizaciones, sean de exclusiva propiedad del trabajador.
Fue una de las iniciativas populares que alcanzó la mayor cantidad de firmas, con 60 mil 850.
Entre quienes votaron en contra, se cuentan a Damaris Abarca, Benito Baranda, Luis Barceló, Adriana Cancino, Roberto Celedón, Aurora Delgado, Javier Fuchslocher, Dayana González, Natalia Henríquez, Bastián Labbé, Elsa Labraña, Francisca Linconao, Janis Meneses, Valentina Miranda, María Rivera, Mariela Serey, Tatiana Urrutia y César Valenzuela.
A favor, en tanto, votaron Rocío Cantuarias, Claudia Castro, Gaspar Domínguez, Teresa Marinovic, Katerine Montealegre, Alfredo Moreno, Manuel José Ossandón y Bárbara Rebolledo.
Entre quienes se abstuvieron, están Patricio Fernández, Lidia González, Giovanna Grandón, Felipe Harboe, Isabella Mamani, Matías Orellana y Fernando Tirado.
De esta forma, la iniciativa quedó definitivamente fuera del proceso constituyente.No obstante, la Comisión aprobó la propuesta de No + AFP, por 20 votos a favor, 12 en contra y una abstención.
El texto presentado apunta a un sistema solidario administrado por el Estado.“El Estado reconoce a todas las personas el derecho a la seguridad social (…) proveyendo prestaciones oportunas y actualizadas; uniformidad, unidad y participación en la administración y esencialmente solidaridad en su financiamiento”, propone.
“La gestión y administración del sistema será pública y recaerá en entes públicos, autónomos sin fines de lucro, cuyo directorio estará integrado por representantes del Estado, los empresarios y los trabajadores”, agrega.
“La seguridad social deberá garantizar que el sistema de pensiones que se establezca entregue prestaciones definidas, de forma tal, dar certezas que el monto de las pensiones cumpla a cabalidad con la suficiencia y asegure que la vejez no esté nunca sujeta a variabilidades de las condiciones político, sociales o económicas”, concluye.
(Foto: cedida)