Economistas y científicos sociales de todo el mundo, elogiamos la convención constitucional chilena. Es el comienzo de la declaración firmada por más de cuarenta profesionales de alrededor del mundo, entre ellos, Mariana Mazzucato, actual profesora de economía de la innovación y el valor público en la Universidad de Londres, y también, Thomas Piketty, profesor de la Escuela de Estudios Superiores en Ciencias Sociales y de la Escuela de Economía de París.
Mazzucato fue una de las colaboradoras al momento de armar el programa de Gobierno del Presidente Gabriel Boric en materia de economía y desarrollo.
La carta destaca el la propuesta de nueva constitución, en el sentido de que da «respuesta a las crisis del cambio climático, la inseguridad económica» e impulsa «el desarrollo sostenible».
Los académicos celebran el enfoque de género, que «por primera vez, una constitución, reconoce el trabajo del cuidado, la reproducción social y la salud de las mujeres como fundamentales para las perspectivas de la economía».
«Los mandatos de política fiscal de la Constitución prometen hacer frente a la desigualdad económica de Chile, que se encuentra entre las más altas de la OCDE», afirma el texto.
«El enfoque de la banca central establece un nuevo punto de referencia mundial. Al consagrar un mandato que tiene en cuenta la estabilidad financiera, la protección del empleo y el cuidado del medio ambiente», añade.
Finamente la carta expone que el marco legal que se establece «logrará preparar a Chile para un nuevo siglo de crecimiento equitativo, con disposiciones para atraer inversiones, proteger la estabilidad financiera y promover el desarrollo de todxs lxs chilenxs».