Manuel Lizana es de Romeral, Hijuelas, donde cuida sus animales y sus cultivos. Pero su tranquila vida se vio interrumpida sorpresivamente: “Bueno, me dio un infarto y ahí me trajeron para Quillota, me diagnosticaron dos arterias tapadas al corazón, así que la única manera para destapármelas era viniendo acá, al Fricke, así que aquí estoy en eso”.
Él es uno de los pacientes que esta semana tuvieron una intervención no invasiva para evitar futuros infartos, en la Unidad de Hemodinamia del Hospital Gustavo Fricke de Viña del Mar.
Mauricio Aninat, jefe de Hemodinamia del establecimiento, afirma que, tal como Manuel, “las patologías coronarias agudas son las que producen los infartos, que en un 50% se desarrollan de forma brusca. El paciente no sabe que tiene esta enfermedad y de repente estalla con un infarto. Y ahí es donde se logra la mayor sobrevida con el uso de toda esta implementación, que nos permite llegar rápidamente con el paciente acá y hacer lo que se llama una angioplastía primaria, osea, entrar con catéteres, con tubitos hasta las coronarias, y destapar las arterias que están en ese momento provocando el problema”.
Procedimientos no invasivos
En la Unidad de Hemodinamia se realizan todos los procedimientos no invasivos cardiológicos, en el fondo, tratando de evitar la invasión quirúrgica de los pacientes, que tanto se hace desde lo vascular periférico como en la parte cardíaca, estructural.
Esto se logra con “válvulas implantadas percutáneamente, sin tener que abrir al paciente, con estudios electrofisiológicos que los hace un especialista para colocar marcapasos como corresponde y una serie de otras técnicas que tienen para poder mejorar la insuficiencia cardíaca o para evitar las arritmias de diversa etiología”, comenta el doctor Aninat.
El especialista explica que “el 80 % de nuestra actividad es coronaria: vamos a las arterias del corazón. Las arterias del corazón sufren una enfermedad muy frecuente y extendida que se llama ateroesclerosis, y va dañando las arterias por dentro y las va estrechando. Eso conlleva a que el paciente comience a limitar su actividad porque le molesta el pecho o empieza con insuficiencia cardíaca, o a veces tiene un paro cardíaco y al recuperarlo vemos que ha sido un problema coronario. Y fundamentalmente eficaz en el tratamiento de las patologías coronarias agudas”.
Así lo comprobó el mentado paciente de Hijuelas: “Ya me destaparon las dos (arterias) así que me voy de vuelta para Quillota. Ningún problema, súper amorosos los doctores, las enfermeras, así que un siete para todos. Yo nunca he estado en Hospitales, primera vez que vengo para acá así que todo bien, excelente, buenas instalaciones. Estoy muy contento de haber llegado acá para que me trataran mi problema y solucionármelo, que era lo que yo quería, así que con éxito fue todo solucionado mi problema”.
Factores de riesgo de la Ateroesclerosis
“Indudablemente, que la ateroesclerosis es la enfermedad más frecuente del ser humano”, aclara Aninat.
“A través de la edad se va produciendo una mayor ateroesclerosis y a veces se puede producir o no síntomas que llevan a descubrirla, pero en general la sufre la gente que tiene factores de riesgo. Y los factores de riesgo de hacer ateroesclerosis y hacer un infarto son varios: los diabéticos, por ejemplo, que tienen una tendencia a tener ateroesclerosis importante, quienes tienen presión alta, hipertensión arterial, el colesterol alto. La gente que tiene antecedentes en la familia de haber tenido uno de estos episodios a temprana edad”, aclara.
Y además se agregan los malos hábitos, como fumar.
Advierte Manuel: “Yo fumaba. Y debido a la nicotina se me taparon esas arterias; de aquí en adelante tengo que cuidarme y no fumar nunca más, para que no se me vuelva a presentar este problema, así que eso es lo que les digo a todos, que se cuiden nomás, que no fumen porque es muy dañino para la salud”.