La revitalización del concepto de “Valparaíso, ciudad universitaria” y la creación de una comisión interuniversitaria sobre salud mental fueron algunos de los temas tratados por el Consejo de Rectores de Valparaíso (CRUV) en su sesión plenaria, la última presidida por el rector Patricio Sanhueza Vivanco, quien deja su cargo.
La presidencia rotativa del CRUV corresponde a la Universidad de Playa Ancha (UPLA) hasta marzo próximo, por lo que desde la próxima semana la asume el reemplazante de Sanhueza, el rector electo Carlos González Morales, quien participó en este encuentro a modo de presentación.
Sus pares despidieron a Patricio Sanhueza con el regalo de un libro y un sencillo homenaje a través del rector de la Universidad de Valparaíso, Osvaldo Corrales, quien destacó “su aporte extraordinario a la región y que además ha tenido un gran compromiso con esta instancia, el Consejo de Rectores de Valparaíso, del que varias veces ha sido su presidente. Ha contribuido a darle realce, a reforzar el rol que jugamos en la región, a mantener la cohesión de este grupo, a presentar proyectos y propuestas”.
También le entregaron un obsequio los miembros de la Comisión Macro, que reúne a representantes de las cuatro universidades de Valparaíso en un rol de coordinación dentro del Consejo.
El rector Sanhueza, que presidió el CRUV en cuatro oportunidades, se declaró “contento de haber avanzado como una institución que además tiene mucho prestigio, reconocimiento, de parte de la comunidad de Valparaíso, por el aporte que hace en distintas perspectivas… Me voy contento de una tarea realizada”.
En la misma sesión participó por primera vez el nuevo rector de la Universidad Técnica Federico Santa María, Juan Yuz Eissman. En agosto se había integrado al Consejo el nuevo rector de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, Nelson Vásquez Lara, quien no participó en esta sesión plenaria por hallarse de viaje.
“Se están incorporando nuevas caras, nuevos rectores, que imagino que le van a dar más impulso a los procesos de desarrollo que tenemos. Esta es una instancia que tiene 54 años de existencia… Veo que se va a seguir potenciando y es necesario, porque es necesario que las universidades colaboren entre ellas, que en vez del verbo competir conjuguen colaborar, contribuir”, opinó Patricio Sanhueza sobre el futuro del CRUV tras su partida.
Ciudad universitaria
Uno de los temas que ha impulsado el Consejo de Rectores de Valparaíso y que el rector de la UPLA priorizó en sus dos últimos mandatos es el de “Valparaíso, ciudad universitaria”. Este concepto experimentará un relanzamiento en noviembre próximo, cuando se realizará un taller que permita el diálogo de diversos actores relevantes para la ciudad.
“Queremos que converjan distintos aspectos de planificación urbana, de tal manera que el trabajo de las universidades se fortalezca en una ciudad que los acoge. Aquí ha habido una alianza con el puerto de Valparaíso, que nos ha hecho algunos ofrecimientos para instalar una instancia que permita una coordinación y trabajar con los actores principales, como la municipalidad, el gobierno regional, el sector público y el privado”, explicó el rector Sanhueza.
Otro de los acuerdos tomados por los rectores porteños es la conformación de una Comisión de Salud Mental, que aunará las capacidades de las distintas universidades y elaborará un plan de acción en esta materia, que se ha transformado en un problema para toda la sociedad.
El CRUV está formado por las universidades de Playa Ancha, Católica de Valparaíso, Técnica Federico Santa María y de Valparaíso. Sus rectores se reúnen en sesión plenaria una vez al mes y el trabajo conjunto se canaliza a través de una variedad de comisiones especializadas.