El Instituto de Salud Pública de la Universidad Andrés Bello dio a conocer la Encuesta Nacional de Salud 2022, que realiza de manera anual desde 2010. Un total de 400 encuestados otorgaron una nota 4.0 al sistema de salud en general, por debajo del 4.5 que recibió a nivel nacional.
En este décimo tercer sondeo, realizado en conjunto con la empresa de investigación IPSOS, se efectuó un trabajo de campo entre el 13 de junio al 20 de julio del 2022 en las regiones de Valparaíso, Biobio y Metropolitana, y estuvo enfocado a los ítems de Índice de percepción, experiencia y expectativa del sistema de salud.
Por su parte, el director del Instituto de Salud Pública UNAB, Héctor Sánchez, añadió que en el Gran Valparaíso fueron encuestadas 400 personas, y la Evaluación al Sistema de Salud en general promedió un 4.0. Frente a la pregunta “con la experiencia que usted ha tenido y su grupo familiar, ¿qué nota le pone usted al sistema de salud?”, en este ítem el estudio promedió un 4.5 de nota final.
Mejora en rapidez
En tanto, una de las alzas más notorias se presentó en los indicadores de experiencia, generada probablemente como una consecuencia del menor colapso en el sistema de salud. Destaca que todos los indicadores de percepción sobre la última atención de salud mejoran considerablemente, al igual que la evaluación de la rapidez de las atenciones.
Se incluyen en esta misma alza, el trato del personal administrativo, la calidad de la infraestructura médica, la comodidad de las salas de espera, los médicos y enfermeras que lo atendieron, el tiempo que le dio el profesional en la atención, entre otros. La percepción de experiencia de la última atención en salud recibida por los pacientes en el Gran Valparaíso en los puntos anteriormente señalados promedió con nota 5.1 este 2022 (en cambio el 2021 promedió un 2.8 y el 2020 un 2.6).
«Estos incrementos están relacionados con las restricciones que vivieron las personas durante la pandemia lo que deterioró los indicadores y ahora que el sistema está abierto a la atención de morbilidad no COVID mejora enormemente la evaluación de experiencia con la sensación de las personas de que “vamos saliendo de la crisis”, sin embargo, aunque estas alzas son notorias en diversas dimensiones de la calidad de atención, no lo son respecto de los tiempos de espera en que los indicadores siguen estando por debajo de estándares razonables. En el caso del Gran Valparaíso en este último aspecto promedió con nota 3.7” explica Sánchez.
“Estas cifras permiten evidenciar la percepción de la población con respecto al verdadero problema del sistema de salud, la brecha que existe entre oferta y demanda de servicios y que dan origen a las listas de espera principalmente en el sistema público, pero incrementándose los tiempos de espera hasta semanas en el sector privado debido al aumento de la demanda por servicios de salud para enfermedades crónicas y a la escasez de especialistas” concluyó el profesional.