La producción discográfica bajo la dirección de la clavecinista Cristina Gutiérrez Campos, redescubre musicalmente el Libro Sesto de María Antonia Palacios, encontrado por el musicólogo Guillermo Marchant entre los escombros desechados por la Iglesia Recoleta Franciscana de Santiago de Chile, el último tercio del Siglo XX.
La música antigua y colonial vuelve a relucir en todo su esplendor a través del rescate histórico con gran valor artístico que representa el lanzamiento del disco “Diálogo entre mundos”, trabajo llevado a cabo por la Orquesta Barroca de Valparaíso y financiado por el Fondo para el Fomento de la Música Nacional, Convocatoria 2022, del Ministerio de las Culturas, las Artes y el Patrimonio, Región de Valparaíso.
La producción discográfica bajo la dirección de la destacada clavecinista Cristina Gutiérrez Campos, es fruto del proyecto titulado «Orquesta Barroca de Valparaíso: Arreglo, Interpretación y Registro de obras de María Antonia Palacios (1790)», y se debe al descubrimiento del Libro Sesto de María Antonia Palacios que realizó el musicólogo Guillermo Marchant en la década de los setenta, del Siglo XX, entre los escombros desechados por la Iglesia Recoleta Franciscana de Santiago de Chile.
“Desde la publicación de la Antología de Música Colonial en 1974, del destacado musicólogo chileno Samuel Claro, la música antigua en Chile se ha transformado en un espacio de construcción de nuestras raíces e identidad mestiza, comprendiendo estos procesos no solo como un reflejo del viejo mundo, sino como un espacio creativo, donde paulatinamente nuestra sociedad comienza a dar rasgos de singularidad. El auge de la música antigua durante el siglo XX trajo consigo en nuestras latitudes un interés musicológico importante y, volver sobre nuestro pasado colonial, significó poder descubrir una importante vida musical que involucró a grandes familias, instituciones y prácticas sociales”, explica Pablo Palacios, musicólogo de la Universidad de Valparaíso.
Cabe destacar que en el manuscrito se pueden encontrar 165 composiciones, muchas de ellas dedicadas al órgano e instrumentos de tecla, siendo una fuente única para el estudio de la música instrumental de uso profano en Chile durante el Siglo XVIII.
La invitación a transportarse a la butaca colonial para disfrutar de la creatividad que dan a luz los mundos entrelazados en el romance musical es para el día viernes 17 de marzo, a las 19 horas, en la Sala Margot Loyola del Instituto de Música de la Pontificia Universidad Católica de Valparaíso, IMUS PUCV, ubicado en calle Pilcomayo, Nº 478, Cerro Concepción, Valparaíso, con entrada liberada.