Su historia es digna de Hollywood: el actor Ke Huy Quan construyó una carrera fuera de la pantalla hasta que, casi cuatro décadas después, su gran regreso lo coronó este domingo con el Oscar al Mejor Actor de Soporte.
Este estadounidense de origen vietnamita tenía 12 años cuando fue a un casting con su hermano, que competía por el papel de Tapón, el niño de «Indiana Jones y el Templo de la Perdición». Pero fue Quan quien resultó elegido para acompañar a Harrison Ford en el exitoso filme de 1984.
Al año siguiente, Quan volvió a destacarse en la pantalla grande con el clásico de aventuras de los años 1980 «Los Goonies». Pero luego, incapaz de capitalizar su fama infantil, terminó trabajando detrás de cámaras como coordinador de dobles.
Ahora, a los 51 años, Quan cerró el círculo cuando se llevó la preciada estatuilla de la Academia por encarnar a Waymond Wang, el oprimido esposo de la dueña de una lavandería que se ve arrastrado a una infinidad de multiversos en «Todo en todas partes al mismo tiempo».
«Mamá, acabó de ganar un Oscar», dijo entre lágrimas Quan, quien recibió una ovación de pie en el Teatro Dolby en Hollywood. El actor –que por este papel ya ganó el Globo de Oro, un BAFTA, un Critics Choice Award y un premio del Sindicato de Actores (SAG)– era el favorito en la categoría, en la que también estaban nominados Brendan Gleeson y Barry Keoghan (por «The Banshees of Inisherin»), Brian Tyree Henry («Causeway») y Judd Hirsch («The Fabelmans»).
Su triunfo es un símbolo para los actores asiáticos, que sienten que finalmente están más representados en la pantalla. «Cuando me alejé de la actuación fue porque había muy pocas oportunidades», dijo hace dos semanas, en un emotivo discurso de aceptación en los premios SAG. «El panorama se ve ahora muy diferente», acotó. De hecho, el elenco de «Todo en todas partes al mismo tiempo» es principalmente de ascendencia asiática: Michelle Yeoh y Stephanie Hsu protagonizan la película junto a Harry Shum Jr. y al veterano actor James Hong.
En la cinta se habla inglés, cantonés y mandarín. La película cuenta la historia de Evelyn (Yeoh) y Waymond (Quan), quienes, al borde del divorcio, se someten a una auditoría fiscal cuando se ven envueltos en una épica batalla multiversal para salvar a la humanidad de una poderosa villana, la cual también es su hija (Hsu). La trama permite a los personajes revaluar sus vidas y decidir qué es importante.
Fuente: Emol.