Lizardo Garrido fue uno de los nuevos entrevistados de Martín Cárcamo en el programa De Tú a Tú, en el que no solamente habló de la leucemia que padece, sino también de su viudez, que causó graves problemas en su salud y de la nueva pareja que ahora lo acompaña.
En el año 2018 falleció su esposa Myriam, a quien conoció a los 19 años, cuando jugaba por Colchagua y más tarde por Trasandino de Los Andes, siendo juvenil de Colo Colo. “Nos casamos con las patas y el buche, no teníamos ni uno. Todo lo mío era incierto, yo jugaba en segunda división”, expresó en el programa.
“Yo creo que le debo todo a ella en el fútbol”, continuó. “Me permitía jugar tranquilo, entrenar tranquilo. Y yo fui bien egoísta con ella, porque ella quería estudiar, pero empezaron a aparecer los hijos, y yo era súper aprensivo. Ella lo tenía todo bajo control”, dijo.
“Fui un poco cobarde, porque la vio un oncólogo y yo debería haberle preguntado la gravedad de esto. Pero yo no quería que me dijeran, porque olfateaba que venía mal la cosa. Y me dicen que tiene un cáncer al pulmón (…) Cuando le cortaron el pelo ahí fue muy difícil, muy fuerte, para ella fue brutal. Y ahí empezó todo este martirio”, expresó Garrido.
El ídolo colocolino, tras la muerte de su esposa, tuvo síntomas similares al llamado “síndrome del corazón roto”, afección cardíaca que se produce ante un impacto emocional fuerte.
“A los 18 o 20 días empecé a sentir una angustia fuerte y un dolor en el pecho. Mi hijo asustado me decía que fuera a la clínica. Partí, llegué justo y me dio un infarto. Estuve 10 días en la clínica. Creo absolutamente que fue de pena, yo lloraba todos los santos días. Después del infarto seguí igual”, reveló el ex lateral.
Un año después, encontró el amor: una amiga a quien conocía desde hace 30 años. “Me llamó, le conté lo que me pasó. Me habló por un año o año y medio, aguantó todos mis llantos y mis penas, todos los días llamándome. Seguimos siendo amigos por dos años”, contó.
“Yo lo siento como un regalo de la vida. Vilma tiene muchas cosas parecidas a Myriam, es súper partner, súper compañera“, cerró el “Chano”.