Por Rodrigo Zambrano, director de Research Chile.
¿Habrá un nuevo retiro de los fondos de pensión? Esta es la pregunta que ha estado en boca de todos. En marzo, la encuesta de Research Chile mostró que el 51% de los encuestados está a favor de esta medida. Aunque este nivel de apoyo es menor que el alcanzado en 2020 (cuando la crisis económica derivada del estallido social y la pandemia hizo que los fondos acumulados en las AFP se vieran como una alternativa para «capear» la crisis), el apoyo a esta medida sigue siendo alto y mayoritario.
Las razones para el actual nivel de adhesión son variadas, pero afirmar que la idea de un nuevo retiro no prende como en años anteriores es un error. Entonces, ¿qué debe pasar para tener (o frenar) un nuevo retiro este año?
Lo evidente para «frenar» un nuevo retiro es que el Estado tome la agenda y proponga alternativas capaces de seducir a la ciudadanía. Sin embargo, el gasto que podría significar dichas propuestas hace que la idea sea difícil de concretar. Por ello, la clave para el gobierno (y para los parlamentarios) estará en el relato que se ofrezca.
Si los parlamentarios que están a favor de un nuevo retiro centran su discurso en que los fondos de pensión son de las personas y, por consiguiente, son los únicos que pueden decidir qué hacer con dicho dinero, estarían cometiendo un error. No porque sea falso, sino porque es redundante, fácilmente controlable y no tendría el mismo impacto (como en 2020) en la sociedad. Lo mismo ocurre con la tentación de recurrir a la mala imagen de las AFP. En contra posición, negarse a un nuevo retiro sólo porque este “provocaría más inflación” también es poco efectivo.
Todos saben (partidarios y detractores) que está no es una buena política pública, pero también saben que es una medida efectiva. Por eso, el relato que se ofrezca a la ciudadanía (tanto si estas a favor o en contra) es crucial, más aún por el hecho de que este debate se dará a menos de 2 meses de la próxima elección de consejeros constitucionales, con los recuerdos aún vigentes del 2021, cuando el entonces Presidente Piñera recurrió al Tribunal Constitucional para impedir la promulgación del tercer retiro, sufriendo un duro revés del tribunal y de la ciudadanía que un mes más tarde apoyaría, con su voto, a las fuerzas contrarias a su gestión infringiendo la peor derrota de la derecha desde el retorno a la democracia.