Las elecciones del 7 de mayo para elegir 50 Consejeros Constitucional terminaron con un claro ganador: El Partido Republicano de José Antonio Kast, que de paso se convirtió en el partido político más votado en la historia del país. Ahora cualquier intento de escribir la nueva constitución debe contar con la venia de la colectividad. Por otro lado, el oficialismo sumó su segunda derrota electoral consecutiva, quedando lejos de los 21 consejeros para obtener poder de veto.
Desde los primeros cómputos la «ola republicana» se estableció como primera mayoría, lo que no cambiaría durante todo el proceso durante la noche del domingo.
Finalmente la colectividad liderada por el ex candidato presidencial obtuvo la impresionante cifra de 3.468.115 votos, correspondiente al 35,40% de los electores que fueron a votar, lo que les permitió elegir 22 consejeros, por sobre la línea roja de los 21 que permite tener poder de veto. Ahora cualquier artículo que sea aprobado en el órgano redactor de la nueva constitución deberá tener la aprobación de la numerosa bancada republicana.
En segundo lugar llegó la lista de Gobierno, Unidad para Chile, con 2.800.973 votos y el 28,59% de las preferencias, que se tradujeron en 17 escaños, lejos del objetivo de los 21 requeridos para el veto.
Tercero arribó «Chile Seguro», que agrupó a la UDI, RN y Evópoli, con 2.063.892 votos y el 21,07% de los electores, con 11 consejeros electos. Ambas derechas tienen 33 electos, lo que les permite alcanzar los 3/5 y escribir la nueva carta magna entre ellos si lo desean.
La lista Todo por Chile, de la Democracia Cristiana, PPD y radicales quedó con 877.199 y el 8,95%, sin elegir a nadie, al igual que el Partido de la gente con sus 537.067 sufragios y 5,48%, con datos del 99,98% de las mesas escrutadas.