Se presentaron los resultados de la Encuesta de caracterización socioeconómica nacional (CASEN), que apunta a conocer la pobreza por ingreso y multidimensional en áreas como educación, salud, vivienda, trabajo, entorno y cohesión social. A ello se suman también evaluaciones por grupos de la población (género, pueblos originarios, migrantes, distinción etaria y más), como también por áreas (rurales y urbanas), a fin de estimar cobertura, focalización y distribución de los principales subsidios monetarios.
El trabajo de campo se hizo entre noviembre de 2022 y febrero de 2023. Se entrevistaron 72.056 hogares, completando 202.231 personas consultadas en todas las regiones del país, en 335 comunas.
La pandemia marcó las estadísticas en la entrega de la encuesta Casen, por lo que si bien se mencionaron los resultados de 2020, la referencia fue respecto a 2017.
Así, el ministro de Desarrollo Social, Giorgio Jackson, encargado de presentar los resultados del sondeo, destacó que hubo un aumento en los “ingresos del trabajo” así como también en el “ingreso autónomo” (que no es producto del trabajo). A ello se suma un aumento significativo de los subsidios monetarios en 2020, a raíz de la pandemia.
Pese a ello, el ingreso promedio mensual en Chile, en palabras del secretario de Estado, destacó por su “desigualdad, con dos extremos muy distantes y en los sectores medios no se aprecia”. Respecto a los subsidios, hubo también un aumento, directamente relacionado con la pandemia.
Los ingresos promedios mensuales del primer decil de la encuesta fueron de $254.840.
La pobreza se estableció en función de la Canasta Básica de Alimentos, que entre noviembre de 2020 y noviembre de 2022 tuvo un aumento de 33,6%. Ello se cruza con el Índice de Precios al Consumidor (IPC) subió 20,9%.
Así, la pobreza por ingresos tuvo una disminución significativa en el país y fue de 6,5% en la población, siendo 1.292.521 las personas que se encuentran en ellas. En 2020 fue de 10,7%, mientras que en 2017 fue de 8,5%.
La línea de la pobreza creció de $174.131 en noviembre de 2020 a $216.849 en 2022. El ministro Jackson aseguró que los ingresos han crecido sustantivamente.
“En términos de serie, desde 2006 hay una tendencia histórica de Chile de reducción sistemática de la pobreza. Sin embargo, a raíz de la pandemia, en 2020 los ingresos autónomos cayeron, lo que tuvo una incidencia en el aumento de esta”, dijo el secretario de Estado.
En cuanto a regiones, fue en La Araucanía donde hubo una mayor reducción de la pobreza, aunque “casi todas las regiones mejoran” en comparación a 2020: las que no retoman la senda fueron Arica y Parinacota, Atacama, Valparaíso, Aysén y Magallanes.
Quienes están en situación de pobreza extrema son aproximadamente 397.963 personas.
Fuente: ADN.