El acto, que tuvo lugar en la Plaza Sotomayor de la ciudad, ha generado controversia y una demanda que argumenta que estos hechos representan un intento de denostar y violentar los valores, símbolos patrios y la función militar, afectando el respeto, la honra y las buenas costumbres.
En el acto, difundido por redes sociales, un grupo de mujeres y disidencias sexuales caminan y realizan gestos en ropa interior enseñando los glúteos, de los cuales cuelga una cola de caballo, mientras algunos músicos enmascarados entonan “Brazas a ceñir”, el himno de la Marina.
Ocurrió a eso de las 13.00 de ese día frente al edificio y al monumento ubicado en la plaza. En tanto, la Armada presentó la denuncia este martes 12 de septiembre ante la fiscalía por un “hecho de connotación sexual”.
“Un grupo de aproximadamente 15 personas realizaron diversos hechos que son constitutivos del delito contemplado en el artículo 373 del Código Penal, esto es, un ultraje público al pudor y las buenas costumbres”, señala la acción judicial.
“Las conductas realizadas consistieron en actuaciones de connotación sexual explícita en la vía pública, a plena luz del día, en presencia de diversas personas, incluidos menores de edad que se encontraban en las inmediaciones y de funcionarios públicos que cumplen sus labores en el lugar. Dichos actos ofenden gravemente el pudor y las buenas costumbres, máxime si se considera que también fueron realizados en la valla perimetral del Monumento a los Héroes de Iquique, lugar donde se encuentra la cripta que resguarda los restos de los Marinos que entregaron su vida por la Patria y que representa el agradecimiento de la ciudadanía de Valparaíso a tal gesta histórica”, plantea el texto.
“Además, se hace presente que el resguardo del Edificio y del Monumento a los Héroes de Iquique, se encuentra a cargo de personal de la Armada de Chile, incluido personal femenino, frente a quienes se efectuaron las conductas denunciadas, obligándoles a presenciar un espectáculo vulgar y procaz, lo que constituye a su vez una ofensa a personal de las Fuerzas Armadas de guardia apostado en esos lugares, hecho previsto y sancionado en el Artículo 283 del Código de Justicia Militar”, puntualiza.
De acuerdo con su sitio web, la Yeguada Latinoamericana es un equipo multidisciplinario que genera y almacena registros audiovisuales, para difundir y disponibilizar prácticas artísticas “que desbordan la institucionalidad del arte en Chile, tomando como partida las sexualidades no heteronormativas y una mirada crítica, feminista e interseccional. El nombre se inspira en las Yeguas del Apocalipsis, duo artístico y político conformado por Pedro Lemebel y Francisco Casas que intervino con su manifestación desde 1993 hasta la vuelta de la democracia.
Vía El Mostrador.