Entre las trece instituciones se cuenta la Universidad de Valparaíso, cuyo estatuto fue aprobado en un referéndum triestamental que se realizó el 2012.
“La ceremonia a la que asistimos hoy representa la materialización de una aspiración largamente anhelada y muchas veces postergada de nuestras comunidades universitarias. Por cierto, es el fruto de las luchas y afanes de varias generaciones de estudiantes, de académicos y de funcionarios que durante décadas se manifestaron por recuperar aquellos derechos que la dictadura les había arrebatado y por volver a un modelo de universidad concebido, no ya desde una perspectiva verticalista y autoritaria, pero tampoco desde un modelo mercantil y clientelar, sino desde un punto de vista colaborativo y democrático, que entiende a nuestras instituciones como comunidades en las cuales el proceso educativo es fruto del diálogo y la reflexión razonada y donde todos y todas participan, desde su propio lugar y rol, en el proceso de toma de aquellas decisiones estratégicas de las instituciones. Una comunidad donde no sólo se forman profesionales sino sobre todo ciudadanas y ciudadanos comprometidos con el desarrollo del país”.
Así se expresó el rector de la Universidad de Valparaíso, Osvaldo Corrales, en parte de su intervención en el acto en que este miércoles 27 de noviembre el presidente de la República, Gabriel Boric, promulgó los nuevos estatutos de trece universidades estatales, entre las que se cuenta la casa de estudios porteña.
La ceremonia tuvo lugar en La Moneda, y contó con la presencia de los rectores y rectoras de las universidades estatales. Consideró las intervenciones de Osvaldo Corrales, presidente del Consorcio de Universidades del Estado (Cuech); David López, presidente de la Federación Nacional de Asociaciones de Funcionarios/as de Universidades Estatales de Chile; Catalina Lufín, presidenta de la FECH, y el Presidente Gabriel Boric.
Al intervenir, Osvaldo Corrales destacó que “resulta significativo que la firma de los nuevos estatutos orgánicos de las universidades del Estado se produzca en 2023, en el marco de la conmemoración de los 50 años del golpe cívico militar, que tanto dolor y angustia trajo a nuestras comunidades y a todo el país. No se trata sólo del cumplimiento de una obligación legal, ni de un mero acto de reforma organizacional de nuestras instituciones, se trata también de un acto de reparación y sanación para nuestras comunidades, y de homenaje a aquellos y aquellas que resistieron en nuestras instituciones y que, lamentablemente, ya no nos acompañan”.
Por ello, dijo, “en este punto, quiero agradecer al presidente Gabriel Boric, al ministro de Educación y al Subsecretario de Educación Superior, por haber tenido la voluntad política para, superando obstáculos propios de este tipo de procesos, posibilitar que esta ceremonia se hiciese en este momento tan especial de la historia de nuestro país, y en este lugar, el Palacio de La Moneda, que es la casa de todas y todos y que simboliza los más altos valores republicanos de nuestra patria”.
Acto significativo
Al hacer uso de la palabra, el presidente Boric señaló que “me emociona este momento”, por cuanto “desde La Moneta estamos celebrando un acto que si bien para algunos pudiera aparecer meramente formal o administrativo, como es la firma de nuevos estatutos de las universidades del Estado, es tremendamente significativo para la democracia y también para nuestro gobierno”.
Asimismo, se manifestó de acuerdo con las palabras de la presidenta de la FECH, quien se refirió a la tardanza de esta instancia, afirmando que “nos demoramos demasiado en llegar hasta aquí, pero llegamos. Y con la firma de estos decretos, todas las universidades estatales chilenas, sin excepción, tendrán por fin nuevos estatutos, que han sido elaborados con la promesa que contienen en sí mismos: democracia y participación”.
Boric señaló que la promulgación de estos estatutos representa un esfuerzo “de las comunidades universitarias completas; este ha sido un anhelo de las comunidades universitarias desde el retorno a la democracia y fue una de las primeras señales también de los límites de la transición a la democracia que evidenciaron varias generaciones del movimiento estudiantil de las últimas décadas. Fue en estas luchas en que como sociedad chilena nos hicimos conscientes y aprendimos que la educación no puede ser concebida como un bien de consumo, y que tener un trato distinto por parte del Estado hacia sus propias universidades no es un privilegio sino un deber”.
Largo trabajo
Por su parte, la presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Catalina Lufín, expresó la satisfacción de ese estamento por esta firma. “Creemos que el día de hoy se lleva a cabo un avance tremendo, un reconocimiento al trabajo que hemos llevado en conjunto estudiantes, trabajadores y en general las comunidades educativas, donde hemos luchado y hemos peleado porque se reconozca nuestra incidencia en la construcción de los proyectos de nuestras propias universidades. (…) También creemos que es una señal muy importante en la que se cierra esta agenda conmemorativa de los 50 años, porque lo que sucede el día de hoy no es inédito, sino que es la recuperación de condiciones que existían antes del Golpe de Estado”, indicó la dirigenta.
A su vez, David López, en representación de los funcionarios y funcionarias de las universidades del Estado, indicó que hubo un trabajo de más de una década para lograr nuevos estatutos, en el que “la participación se ganó con el trabajo de los y las dirigentes gremiales. Incluso hubo temas que no pudimos conseguir, como la participación en las elecciones de rectores. (…) En este proceso, algunos compañeros y compañeras universitarios se han jubilado o han fallecido y quiero recordarlos en este lugar, porque su compromiso y su trayectoria de vida con su universidad fueron muy relevantes para llegar a este momento. Esta ceremonia también es un acto de reparación para ellos y ellas, que lucharon, resistieron o fueron asesinados, pero jamás podrán silenciar sus ideas”.
Nuevos estatutos
Los nuevos estatutos de las trece universidades estatales fueron firmados por el presidente Gabriel Boric y por el ministro de Educación, Nicolás Cataldo.
Las trece universidades que cuentan desde esta firma con nuevos estatutos son las siguientes: Universidad de Tarapacá, Universidad Arturo Prat, Universidad de Antofagasta, Universidad de Atacama, Universidad de La Serena, Universidad de Valparaíso, Universidad de Playa Ancha, Universidad de Santiago de Chile, Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación, Universidad de Talca, Universidad del Biobío, Universidad de La Frontera y Universidad de Magallanes.
La Universidad de Chile, la Universidad de O’Higgins y Universidad de Aysén ya cuentan con estatutos creados en democracia. Por su parte, la Universidad Tecnológica Metropolitana y la Universidad de Los Lagos también rediseñaron sus estatutos, los que serán firmados el próximo año.
Estatuto UV
En lo que respecta al estatuto de la Universidad de Valparaíso, cabe recordar que fue elaborado con la participación de docentes, funcionarios y estudiantes, para reemplazar las normas vigentes desde 1981, que se establecieron unilateralmente durante la dictadura. El texto promulgado por el presidente de la República fue entregado como proyecto al Ministerio de Educación en enero de 2022, tras ser aprobado por el Consejo Académico Ampliado de la UV el 8 de junio de 2021 y posteriormente validado por la Junta Directiva de la institución, como parte de un proceso que comenzó en 2008 y que incluyó un referéndum triestamental que se realizó en noviembre de 2012, en el que obtuvo el 69,1 por ciento de los votos.