Este servicio revolucionario permite ahora conectar Santiago con Curicó en tan solo 2 horas, casi 20 minutos menos que los trenes convencionales, alcanzando una velocidad de 160 km/h.
La mañana de este viernes marcó un hito histórico para Sudamérica con la inauguración del primer viaje comercial del tren más rápido y moderno de la región. El ministro de Transportes, Juan Carlos Muñoz, la ministra secretaria general de Gobierno, Camila Vallejo, y el presidente de EFE, Eric Martin, fueron los encargados de dar la bienvenida a este nuevo servicio que transforma la conectividad entre Santiago y Curicó.
Con una velocidad de 160 km/h, este servicio ferroviario reducirá significativamente el tiempo de viaje, llevando la conexión entre ambas ciudades a tan solo 2 horas. El tren cuenta con una capacidad para 236 pasajeros y está equipado con características de vanguardia, como accesibilidad universal, baños adaptados para personas con movilidad reducida, espacios dedicados para sillas de ruedas, amplia reclinación en todos sus asientos, climatización e información al pasajero a través de pantallas LED.
El ministro Juan Carlos Muñoz expresó su entusiasmo ante este acontecimiento, calificándolo como un «momento histórico para Sudamérica» y destacó la importancia de mejorar la red ferroviaria de Chile para el beneficio de todos los ciudadanos. Además, resaltó el esfuerzo de la Empresa de Ferrocarriles del Estado (EFE) en la recuperación de la red, que no solo llega a Curicó en esta fase, sino que se espera extenderla hasta Talca en febrero y Chillán a finales del segundo trimestre.
La ministra Camila Vallejo enfatizó que este logro es parte de los compromisos del presidente Gabriel Boric en su política de trenes para Chile. «Los trenes no solo nos permiten mayor conectividad, sino que también descentralizan el país y mejoran la calidad de vida de las personas en las regiones», afirmó. Vallejo subrayó que este avance no solo significa mejor conectividad y descentralización, sino también más sustentabilidad y mejor desarrollo.
Los nuevos trenes, dotados de sistemas de alimentación bimodal que pueden funcionar tanto con alimentación eléctrica como con combustible diésel, ofrecerán un servicio expreso entre Estación Central y Curicó con una única parada en Rancagua. Este servicio contempla seis frecuencias diarias, sumándose a las cuatro existentes con trenes convencionales, brindando así un total de 10 alternativas de transporte (5 por sentido). Este avance representa un paso significativo hacia un transporte más rápido, eficiente y sostenible en Chile.