La alcaldesa de Viña del Mar, Macarena Ripamonti, ha tomado medidas urgentes ante la situación de los damnificados por el reciente incendio que afectó a nuestra comunidad. En un esfuerzo por garantizar el bienestar de quienes se han visto afectados, la alcaldesa ha enviado un requerimiento al subsecretario del Interior y Delegada Presidencial, instando a la entrega inmediata de 30 mil cajas de alimentos para los afectados y solicitando que no se suspenda el beneficio para los vecinos de la zona.
«A la fecha, no hemos recibido respuesta a nuestra solicitud inicial de apoyo alimentario para los damnificados del incendio del 2 y 3 de febrero». La alcaldesa, en su oficio dirigido al subsecretario del Interior, Manuel Monsalve, y a la Delegada Presidencial, Sofía González, ha reiterado la urgencia de esta ayuda básica, respaldada por informes sociales elaborados en los territorios afectados y la preocupación ante la información que indica una posible suspensión del suministro de alimentos por parte del servicio correspondiente.
«La provisión de alimentos y recursos corresponde a algo que se denomina el Comité de Ayudas Tempranas; todo lo que se compra por medio de esos servicios es a través del Ministerio del Interior y nosotros hemos oficiado para solicitar, que por favor, en medio del invierno más duro, en donde están cayendo 40 milímetros de agua en un par de horas, no generemos fragilidad en las personas que lo han perdido todo», expresó la alcaldesa Macarena Ripamonti.
En el oficio dirigido al Ministerio del Interior, la alcaldesa argumenta la necesidad imperante de las 30 mil cajas de alimentos, considerando las bajas temperaturas en nuestra ciudad y los pronósticos que indican fuertes precipitaciones durante varios días. Se hace un llamado urgente a intervenir para agilizar este trámite administrativo y evitar dejar en indefensión a quienes más lo necesitan.
Además, la alcaldesa ha solicitado información sobre la extensión de la entrega de los Bonos de Acogida y los criterios utilizados para dejar de entregar este beneficio a algunas personas afectadas. Se hace un especial énfasis en la necesidad de mantener las promesas realizadas a los vecinos de mantener estos beneficios, al menos durante seis meses, especialmente en el contexto del invierno más crudo que estamos atravesando.