La Corte de Apelaciones de Valparaíso confirmó la sentencia del Juzgado de Letras del Trabajo de Valparaíso que condenó a la Universidad Católica de Valparaíso al pago solidario de la indemnización por años de servicio de una trabajadora que se desempeñó en el casino del campus Curauma, en régimen de subcontratación.
La trabajadora, que había prestado servicios durante varios años, fue despedida sin causa justificada en febrero de 2023. Tras no lograr un acuerdo en la Inspección del Trabajo, presentó una demanda en el tribunal laboral.
En primera instancia, el Juzgado de Letras del Trabajo de Valparaíso acogió la demanda y condenó a la UCV al pago de la indemnización por años de servicio, considerando que la trabajadora había estado a disposición de la universidad hasta la fecha de su despido.
La UCV apeló la sentencia, alegando que la trabajadora había dejado de prestar servicios a principios de enero de 2023 y que, por lo tanto, no correspondía el pago de la indemnización por años de servicio.
Sin embargo, la Corte de Apelaciones de Valparaíso rechazó el recurso de nulidad interpuesto por la UCV, confirmando la sentencia de primera instancia. El tribunal de alzada señaló que la sentencia impugnada se basó en la prueba rendida en el proceso y que no había sido posible establecer que la trabajadora hubiera dejado de estar a disposición de la UCV antes de su despido.
Este fallo ratifica la obligación de las empresas de cumplir con las normas laborales, incluso cuando se trata de trabajadores contratados a través de empresas subcontratistas.