La Escuela Pacífico, que se encuentra en la parte alta de Playa Ancha y cuenta con una matrícula de 131 estudiantes desde prekínder hasta octavo básico, es el escenario de un importante proyecto de promoción de hábitos saludables, liderado por las Escuelas de Odontología y de Nutrición y Dietética de la Universidad de Valparaíso. El programa busca mejorar la salud bucal y nutricional del estudiantado a través de evaluaciones, talleres educativos y actividades preventivas, junto a la implementación de un cepillero escolar y una huerta escolar, entre otras acciones.
Marjorie Borgeat, académica de la Escuela de Odontología UV y una de las directoras de la iniciativa, explicó que el proyecto, adjudicado en enero de este año y financiado por la Vicerrectoría de Vinculación con el Medio en el marco del proyecto UVA 2295, se extenderá hasta mayo de 2025.
«Es un proyecto educativo de salud nutricional y bucal que impacta a la comunidad de la Escuela Pacífico, perteneciente al Servicio Local de Educación Pública de Valparaíso, nuestro socio comunitario. La elección de este establecimiento responde a que está ubicado en Playa Ancha, al igual que nuestra Escuela de Odontología, y a su vulnerabilidad, lo que la convierte en un espacio idóneo para implementar actividades preventivas en niños y niñas que realmente lo necesitan», señaló.
El programa ha contado con la participación activa del personal educativo de la escuela y ha logrado instaurar hábitos de higiene bucal: «Es un esfuerzo grande para los profesores estar pendientes del cepillado de dientes después del desayuno y almuerzo de los escolares, pero se han comprometido a full. Los niños y niñas ya lo tienen incorporado como hábito», destacó la doctora Borgeat, quien también valoró la cooperación de la Cámara de la Industria Cosmética de Chile, que donó kits de cepillos y pastas de dientes para las y los estudiantes, garantizando su uso durante todo el año, incluyendo el período de vacaciones de verano.
La académica agregó que se les realizó un examen dental completo a todos los niños y niñas de la escuela. Además, se llevaron a cabo talleres preventivos sobre caries, enfermedades de las encías, consumo de tabaco y alcohol, así como orientación sobre cáncer bucal.
El proyecto también ha tenido un impacto positivo en la formación de los estudiantes de Odontología de la UV, quienes han participado activamente en la confección de material educativo. Asimismo, la profesora adelantó que durante este mes de octubre se lanzará un libro de educación para las familias, lo que refuerza la continuidad del programa.
«Este tipo de iniciativas ayuda a nuestros estudiantes a poner en práctica los conocimientos adquiridos en promoción de hábitos saludables y prevención de enfermedades», explicó la doctora Borgeat.
Se realizará una nueva evaluación en marzo de 2025 para medir el impacto del cepillado en la prevención de caries, lo que permitirá generar más evidencia sobre los beneficios del programa y gestionar nuevos fondos para su ampliación a otras escuelas de la zona.
La colaboración con la comunidad local ha sido clave para mantener el proyecto en marcha y asegurar su viabilidad. «Es un esfuerzo conjunto que no solo beneficia a los escolares, sino también a sus familias, al brindarles educación y apoyo en temas cruciales para su salud y bienestar», señaló la profesora Borgeat.
A nivel nutricional, la académica Pamela Estay, codirectora del proyecto y jefa de carrera de la Escuela de Nutrición y Dietética, sostuvo que “la Escuela de Nutrición ha estado trabajando junto a la Escuela Pacifico en el diagnóstico general de las necesidades de la escuela, además de un diagnostico alimentario nutricional preliminar de las y los escolares. Durante el presente año, se han realizado sesiones educativas, en torno a alimentación saludable y colaciones adecuadas para la edad, junto a los y las estudiantes de quinto año, quienes realizan su práctica profesional en el área no tradicional dentro de la Escuela Pacífico”.
En esa línea, la profesora Estay destacó que junto a estudiantes de la Escuela de Nutrición, docentes y escolares de la Escuela Pacífico, se ha reactivado el huerto escolar: «Hemos trabajado en la limpieza y mejora del suelo, desmalezado las áreas de cultivo, sembrado semillas de rúcula, espinaca y lechuga, y plantado almácigos de albahaca y diversas variedades de lechuga», explicó.
Además, subrayó la participación activa de los niños, niñas y la comunidad educativa en todo el proceso. «Las huertas escolares no solo acercan a los estudiantes a la producción de alimentos sanos y nutritivos, sino que también crean laboratorios vivos que permiten el aprendizaje al aire libre, fomentando una conexión directa con la producción de alimentos saludables e inocuos», afirmó la nutricionista.
La codirectora agregó que “la idea es que los y las estudiantes se familiaricen con el proceso de producción de alimentos en contacto con la tierra, que conozcan sus propiedades y procesos de cultivo. Además, los alimentos que cosechen del huerto se utilizarán para desarrollar talleres de cocina fácil y saludable, en donde aprendan los beneficios de su consumo y preparen recetas atractivas y nutritivas”.
Las directoras coincidieron en afirmar que el éxito del proyecto ha sido posible gracias al compromiso de un equipo multidisciplinario, conformado por docentes y estudiantes de ambas Escuelas. Entre ellos, por parte de Odontología destacaron la colaboración del doctor Richard Ahumada y la doctora Karina Cordero, de la cátedra de Patología, y los docentes Alejandro Orellana, Natalia Oliva, Andrea Cerón, Rosario Navia y Sebastián Guerra, de Odontología Preventiva. Mientras que por Nutrición y Dietética relevaron la participación de las doctoras Marcela Vizcarra, Ángela Martínez y Carolina Henríquez y la docente Yasna Muñoz, además de estudiantes de las asignaturas Alimentación en el Ciclo de la Vida y TIPE, como también el importante apoyo de la estudiante de Nutrición Lesly Figueroa —quien además es agrónoma— en la reactivación del huerto escolar.
«Es un esfuerzo conjunto que no solo beneficia a los estudiantes, sino también a sus familias, al brindarles educación y apoyo en temas cruciales para su salud y bienestar», señalaron las directoras.
La iniciativa ha sido recibida con entusiasmo por la comunidad escolar. Manuel González, director de la Escuela Pacífico, expresó: «Es una muy buena iniciativa que la Universidad se vincule con el territorio. Este proyecto no solo mejora la salud bucal de nuestros estudiantes, sino que también aborda la alimentación saludable y otros aspectos clave para su bienestar integral».
El proyecto ha logrado mejorar la salud bucal y nutricional de los estudiantes de la Escuela Pacífico, a la vez que sienta las bases para futuras intervenciones en otras escuelas. De confirmarse los resultados positivos, la Universidad de Valparaíso espera replicar este modelo en otros establecimientos educativos, ampliando el impacto de esta innovadora iniciativa de vinculación con el medio.