El expresidente francés Nicolas Sarkozy entró este martes en la prisión de La Santé, en París, para cumplir la pena de cinco años impuesta por la financiación de la campaña electoral que ganó en 2007 con dinero del régimen libio de Muamar Gadafi, lo que le convierte en el primer exjefe de Estado francés en ser encarcelado.
Sarkozy llegó a la prisión, situada en el distrito XIV, escoltado en un coche negro y seguido por motoristas de televisiones que trasmitieron en directo el trayecto desde su domicilio en el distrito XVI. Su entrada se produjo sobre las 9.39 horas locales en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.
Su encarcelamiento, que causó un shock en una parte de la sociedad francesa, fue seguido por decenas de medios de comunicación nacionales y extranjeros, incluso varias televisiones trasmitieron el trayecto del exjefe desde su domicilio en directo.
Sarkozy salió sobre las 9.10 horas locales de la mano de su mujer, Carla Bruni, y en compañía de sus hijos y sus hermanos de su domicilio, donde varias decenas de personas se congregaron en muestra de apoyo al exjefe de Estado y le aplaudieron después de cantar la Marsellesa, el himno de Francia.
Justo antes de poner rumbo a La Santé, el expresidente publicó un mensaje en sus redes sociales: «Al prepararme para cruzar los muros de La Santé, mis pensamientos están con el pueblo francés».