En la V Región, al cierre de febrero, el número de casos activos de COVID-19 se volvió a disparar, llegando a 2.620, mientras que la positividad superó el 7%, porcentaje dos veces mayor al recomendado. Esto, según el último informe semanal del laboratorio médico de la Universidad de Valparaíso (UV), donde se reitera que el actual nivel de circulación del virus en la región hacer prever un complejo escenario para mediados de marzo.
La temporada estival 2021 en la Región de Valparaíso está llegando a su fin, no así la pandemia. Lejos de haber disminuido, la presencia y circulación del virus que causa el COVID-19 siguen siendo extremadamente altas.
En efecto, al cierre de febrero, los contagios en esta zona registraron la cifra más elevada en lo que va de este año, y se mantienen apenas por debajo de las contabilizadas durante junio y julio pasados, meses que marcaron el peor momento de la enfermedad a nivel nacional y local.
Por ello, y dado que aún la presencia y movilidad de veraneantes sigue siendo elevada en la mayoría de las comunas costeras y algunas del interior de la región, el panorama podría agravarse todavía más durante las siguientes dos semanas.Así se desprende del último informe epidemiológico emitido por el Laboratorio de Biología Molecular del Centro de Investigación y Diagnóstico de Enfermedades Infecciosas (CIDEI) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso, que señala que durante la semana comprendida entre el lunes 22 y el domingo 28 de febrero el porcentaje de los test procesados por esa unidad que confirmaron la presencia de COVID-19, con respecto al total de exámenes de PCR practicados durante esos días fue de 7,1%.
Aunque la cifra volvió a disminuir, esta vez en casi dos punto porcentuales respecto de la registrada en la semana inmediatamente anterior, el indicador sigue siendo dos veces mayor al que las autoridades sanitarias consideran adecuado para mantener a raya la expansión de la enfermedad.
Del mismo modo, el análisis confeccionado por el CIDEI-UV (elaborado en base a 765 muestras para SARS-CoV-2, derivadas principalmente del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota) da cuenta que durante los siete últimos días el número de casos activos volvió a experimentar una considerable alza, de 2.213 a 2.620, al igual que su tasa de incidencia o cantidad de personas capaces de infectar a otras por cada cien mil habitantes, que subió de 112,9 a 133,7.
“Al analizar estas cifras, y en particular las referidas a los casos activos y su tasa de incidencia, vale decir, las personas con confirmación o sospecha de COVID-19 que pueden infectar a otras por cada cien mil habitantes, se tiene que en esta región su número sigue al alza, consolidando las cifras ya elevadas que venían contabilizándose durante el verano. Esto implica, además, que la pandemia sigue activa en esta zona y al menos lo estará por las siguientes dos semanas, ya que -como lo hemos explicado antes- la evolución de esta pandemia se ve reflejada con unas dos semana de retraso. Es decir, las cifras que hoy tenemos generarán efectos en unos quince días más”, afirma el médico infectólogo y director del Centro de Investigación y Diagnóstico de Enfermedades Infecciosas (CIDEI) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso, Rodrigo Cruz.
Positividad estable
Respecto a la positividad, el especialista sostiene tras haber crecido de manera importante desde mediados de diciembre -cuando marcada apenas un 2,99%- y de haber llegado a un peak de 10% hace dos semanas, este indicador está tendiendo hoy a estabilizarse. Sin embargo, el doctor Cruz precisa que sus niveles todavía son preocupantes.
“La tasa de positividad en las última semana bajó de 8,9% a 7,1%, pero se mantiene muy por encima del 3% recomendado. La razón de esta baja, que contrasta con la fuerte alza de los casos activos, se debe a que ha aumentado en número de testeos. Es decir, se están realizando más exámenes tendientes a detectar a nuevas personas infectadas, pero esto no implica que la presencia y circulación del virus este disminuyendo. Al contrario, las cifras de activos revelan lo opuesto”, acota el médico infectólogo y director del (CIDEI) de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso. Como consecuencia de esta situación, Rodrigo Cruz insiste en la necesidad de respetar las medidas establecidas por la autoridad sanitaria, en especial las básicas de prevención (uso de mascarilla y lavado frecuente de manos y evitar las aglomeraciones), y favorecer el trabajo telemático y el ingreso presencial de los estudiantes, mientras se logra una vacunación de al menos un 80% de nuestra población. “ Solo así podremos ir disminuyendo los contagios” , concluye el médico infectólogo.
El informe epidemiológico del Centro de Investigación y Diagnóstico de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso es publicado cada lunes y complementa la información oficial entregada por el Ministerio de Salud.