En los últimos días, si bien autoridades como especialistas en medicina intensiva han advertido sobre el crítico momento por el que atraviesa el sistema de atención de salud a nivel nacional y en la mayoría de las regiones, debido al exponencial aumento que han registrado los contagios de COVID-19, especialmente durante marzo, parte importante de la población parece no estar al tanto de lo dramática y compleja que es situación.
El MINSAL admitió errores en la comunicación de riesgo, lo que se tradujo modificaciones en el Plan Paso a Paso y en el endurecimiento de las restricciones, pero esto tampoco parece estar rindiendo el resultado esperado. Pese a estar bajo cuarentena, la movilidad apenas se ha reducido en las principales comunas del país y todavía se notifican a diario decenas de fiestas clandestinas, detenidos por mal uso de permisos e incumplimiento de las medidas esenciales destinadas a prevenir la enfermedad.
No es de extrañar que, a nivel país, en las cuatro semanas anteriores los contagios de COVID-19 hayan aumentado un 22%, los casos activos un 62%, las muertes asociadas a este mal un 12% y las personas internadas en UCI afectadas con el virus un 90%. En el caso de la Región de Valparaíso, en tanto, los contagios subieron un 34%, los casos activos un 50%, las muertes un 20% y los pacientes en UCI un 99%, como lo consigna el informe más reciente del Centro de Diagnóstico e Investigación de Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Valparaíso (CDIEI-UV).
Tras conocerse los resultados del más reciente informe, el director del centro, el médico infectólogo Rodrigo Cruz, indicó: «Todas estas cifras son realmente impactantes, en especial las relativas a las muertes y, por cierto, las que dan cuenta de los pacientes en camas críticas, la mayoría de los cuales está con ventilación mecánica. A comienzos de marzo sabíamos que el sistema estaba sobreexigido, pero ahora, con la pandemia ya desatada, lo que se vive al interior de los centros asistenciales es indescriptible. Con este porcentaje de ocupación estamos en el umbral del nivel crítico. Si los contagios no bajan con fuerza ahora, en diez días más lo cruzaremos y al sistema de atención no le podremos exigir. No es por ser alarmista, pero si esto no cambia el sistema de salud colapsará y no solo por falta de camas, sino porque los equipos sanitarios no podrán atender adecuadamente a los ingresados en las UCI”.
En este sentido, Cruz coincide con lo expuesto por el internista y asesor del Ministerio de Salud, Tomás Reguerira, quien adelantó que de no bajar los contagios en ese plazo se van a requerir unas 400 camas críticas más.
“En efecto, como resultado de los 7 mil a 8 mil nuevos contagios diarios que se han registrado en promedio, hoy ingresan unas cuarenta personas extras a las UCI cada día. En diez días, esa será la cantidad de nuevas camas que se necesitarán. Pero el sistema no va a poder seguir creando camas de esa manera. Necesitamos que los contagios bajen al menos un 20% para evitar el colapso. Qué decir si estos se disparan a 9 o 10 mil”, precisa el director del CDIEI-UV.
Últimas cifras
En cuanto a las cifras generales, el último informe del Centro de Diagnóstico e Investigación de Enfermedades Infecciosas de la UV da cuenta de que entre el 29 de marzo y el 4 de abril en la Región de Valparaíso los casos activos, es decir, de las personas que permanecen enfermas, aumentaron un 13,2%, de 5.717 a 6.476, otra vez la cifra más alta de la pandemia. En tanto la incidencia o ponderación de personas con confirmación o sospecha de Covid-19 que pueden infectar a otras por cada cien mil habitantes, ésta subió de 291,7 a 330,3, superando por segunda vez a la incidencia nacional, que en igual período llegó a 296,9.
En cuanto a las comunas que integran el Gran Valparaíso, los casos activos aumentaron un 4,7% en Valparaíso (que sigue siendo la segunda comuna con más casos de este tipo en el país), un 2,5% en Viña del Mar (sexta a nivel nacional), un 22,5% en Quilpué, un 8,7% en Villa Alemana y un 24,1% en Concón. En cuanto a las capitales provinciales con mayor población, en Quillota subieron un 7,9%, un 68,6% en Los Andes, un 101% en San Felipe y un 50% en San Antonio.
“Al comparar estos porcentajes con los dados a conocer en el informe anterior, llama la atención, por un lado, la leve desaceleración del incremento que experimentaron Valparaíso, Viña del Mar y Villa Alemana y, por otro, el fuerte aumento que exhibieron las capitales provinciales del interior, en especial la de San Felipe, que duplicó sus casos activos. Asimismo, cabe mencionar a San Antonio, que registró una importante alza después de haber completado cuatro semanas consecutivas a la baja”, observa el médico infectólogo y director del CDIEI-UV.
Al respecto, el especialista argumenta que aún es temprano para aventurar alguna explicación de lo sucedido, ya que si bien la desaceleración de las tres primeras comunas podría ser consecuencia de las cuarentenas, ésta también podría obedecer a una eventual demora en la notificación de los nuevos contagios a raíz del feriado de tres días de Semana Santa. Y en cuanto a la notoria subida en las comunas del interior, el especialista comentó que en los últimos días se ha observado un aumento de la movilidad, una suerte de relajo, que bien podría estar detrás del cambio en las curvas correspondientes.
“Sorprende en especial San Antonio. Esto se debe probablemente al aumento de la movilidad en una ciudad que va para dos meses en confinamiento masivo”, asegura Cruz.
Positividad
En cuanto a la tasa de positividad, el informe del CIDEI-UV (elaborado esta semana en base a 700 muestras para SARS-CoV-2, derivadas principalmente del Servicio de Salud Viña del Mar-Quillota) señala que entre el 29 de marzo y el 4 de abril el porcentaje de los test procesados por esa unidad que confirmaron la presencia de Covid-19 fue de 17,3%. Este bajó un punto respecto del registrado en la semana inmediatamente anterior.
“La positividad regional sigue siendo prácticamente la misma. Esta baja no es significativa, dada la baja en el testeo por Semana Santa. Además, sigue siendo muy superior a la nacional y casi seis veces mayor a la que se considera adecuada para mantener a raya la expansión de la enfermedad. Tampoco han mejorado los indicadores de trazabilidad y seguimiento, que siguen siendo insuficientes”, afirma el doctor Rodrigo Cruz.
Impacto de la cuarentena
Ante este panorama, el doctor Rodrigo Cruz reitera su llamado a las personas a cumplir con las cuarentenas.
“Si éstas no son respetadas por al menos el 70% de la población, no tendrá el efecto deseado. Chile y nuestra región se encuentran en una crisis sanitaria sin precedentes, con indicadores superados con creces para el adecuado control de un desastre que pudo haberse evitado en parte. En este punto de la pandemia insisto en las medidas que se sabe son efectivas, tanto en el hogar, los trabajos y en todas las actividades de la vida diaria. La autoridad sanitaria debe, además, seguir corrigiendo medidas”, concluye el especialista.
El informe epidemiológico del Centro de Investigación y Diagnóstico de Enfermedades Infecciosas de la Facultad de Medicina de la Universidad de Valparaíso es publicado cada lunes y complementa la información oficial entregada por el Ministerio de Salud.