Durante las ultimas semanas, el Gobierno ha endurecido las medidas sanitarias tendientes disminuir la alta tasa de contagios de COVID-19, que se han registrado en distintos puntos del país y en la Región de Valparaíso. Una de las más polémicas ha sido la restricción de venta de distintos artículos catalogados como “no esenciales” por la autoridad de salud, perjudicando a pequeños comerciantes y sus familias, quienes no podrán percibir ingresos mientras se mantengan estas restricciones.
No obstante, el cobro de pejes siguió funcionando en comunas con alta tasa de contagios y en Fase 1 o 2 del Plan “Paso a Paso”. Ante este panorama, el alcalde de Llay Llay, Edgardo González Arancibia, presentó un requerimiento formal ante la Seremi de Salud de Valparaíso, donde pide de manera urgente el cierre de los peajes que se encuentran ubicados en comunas que están en cuarentena.
“Esta solicitud tiene varios motivos. Primero es para dar un sentido de justicia, porque no existe justificación que los peajes, que claramente no son servicios esenciales, sino que es un actividad lucrativa y comercial estén funcionando, siendo que, en las mismas comunas con cuarentena existen comercios, emprendedores y feriantes que no pueden funcionar, lo que no es justo. Pero también tiene un sentido de proteger a las personas, ya que el traspaso de dinero al momento de pagar el peaje es una posible fuente de contagio por la constante manipulación de objetos que pueden llevar el virus. La idea es poder cuidar a los trabajadores y sus familias, teniendo el derecho de seguir recibiendo su remuneración”, señaló el jefe comunal.
Finalmente, la autoridad recalcó que: “en base a esto, pedimos a la Seremi de Salud y al gobierno que se pronuncie si los peajes son o no son servicios esenciales, lo que claramente a nuestro juicio, de los vecinos y vecinas, los peajes no constituyen un servicio esencial, por lo que no podrían funcionar en comunas con cuarentena”.