Incorporar una «dosis de refuerzo» (la llamada tercera dosis) para fortalecer la inmunidad contra el COVID-19 que otorgan los esquemas de vacunación completos, recomendó el Comité Asesor en Vacunas e Inmunizaciones (Cavei) al Ministerio de Salud.
«La introducción de una dosis de refuerzo deberá implementarse bajo un modelo de priorización de acceso a la vacunación que garantice que aquellos en mayor riesgo (…) y con mayor tiempo de esquema de vacunación completo, lo hagan primero», enfatiza el ente técnico en su respuesta.
Tomando en cuenta ese criterio, «los trabajadores de la salud, población con tratamiento inmunosupresor y trasplantados, personas mayores, personas en residencias de larga estadía, población en privación de libertad, personas con comorbilidades e individuos que cumplen labores críticas para el funcionamiento del país», en ese orden, deberían ser los primeros en recibir otra dosis.
Además, plantean priorizar en un eventual calendario a personas vacunadas con Sinovac, AstraZeneca y CanSino: «El refuerzo de los esquemas primarios debe comenzar con población que haya completado su esquema primario con vacuna COVID-19 de plataforma tecnológica distinta a ARN mensajero».
De momento, el Minsal ya hizo pública su decisión de que pacientes inmunodeprimidos y trasplantados podrán recibir un refuerzo, quienes deberán contar con indicación médica para que este se les administre.
Fechas y fórmulas
Tras esta recomendación, se espera que una decisión se confirme en cuanto se entreguen los resultados preliminares del estudio clínico realizado en la ex Posta Central con la participación de más de 570 adultos mayores, funcionarios de salud y de establecimientos de larga estadía, informe que debería estar listo el fin de semana.
Por otro lado, el Cavei estima que «si la prevención de COVID-19 severo sigue siendo el objetivo principal de la estrategia de vacunación general, es poco probable que la mayoría de las personas requieran dosis de refuerzo dentro de los 18-24 meses». Dicho esto, «las personas mayores de 70-75 años y otras poblaciones de riesgo pueden beneficiarse del refuerzo de la vacunación dentro de un año del esquema primario».
En tanto, plantea que la aplicación de estas dosis debe hacerse antes del 2022 «si la estrategia se amplía para limitar la circulación del virus (variante) en el invierno» y aumentando la meta de cobertura «a más del 80-85 por ciento de la población adulta».
Sin embargo, el documento no especifica una fórmula ideal para un programa de refuerzo, sino que se plantea en general aplicar esquemas homólogos o heterólogos dependiendo de lo que se busca conseguir, como reducir transmisibilidad o la mortalidad y hospitalización.
(Fuente: Cooperativa).