Por Mirian Mondaca Herrera
Brutales agresiones y amedrentamientos son denunciadas por dos dirigentas socioambientales de la localidad de Laguna Verde en Valparaíso, quienes por años han defendido el acceso al agua de su comunidad y vivir sin contaminación. Los hechos, que afectaron a Julia Poblete y Karina Jiles se registraron durante la primera semana de este 2022.
En el caso de Julia Poblete, la madrugada del 1 de enero tras ver el espectáculo de fuegos artificiales en la localidad, la mujer fue rociada con combustible y luego le prendieron fuegio mientras caminaba a su casa con su hija y su nieto. Según su relato, solo su rápida reaccion para sacarse sus ropas, permitió que no terminara con lesiones de gravedad y solo con su cabello quemado.
«Yo venía caminando, terminando los fuegos artificiales con mi nieto y mi hija, y de repente miro hacia el lado derecho y veo que tengo fuego en la espalda. Me tiraron combustible y me prendieron fuego. A mí nieto le tiraron también combustible en la cara», detalla Poblete, quien agradece que a su nieto no le prendieron fuego también.
Según esta dirigenta, además, durante los últimos tres años ha recibido amenazas de muerte e insultos en la vía pública.
El amedrentamiento en contra de la otra dirigenta, Karina Jiles, ocurrió el 5 de enero tras participar en una manifestación. Al llegar a su domicilio encontró a una mascota, una chancha, agonizando con un hecha entre sus costillas.
La chancha estaba sobre su charco de agua y, al acercarse la dirigenta, notó las condiciones en las que se encontraba y que derivaron la muerte de la mascota más tarde. «Mi chancha se paró después de ahí y no estaba muerta. Se paró y caminó hasta el lugar donde ella dormía, donde vivía y ahí se murió, pero igual es un trayecto largo desde donde estaba la chanchita tendida en el charco de agua hasta donde tenemos los corrales. Tendremos 100 metros fáciles. Todo ese trayecto con el hacha en las costillas y con las tripas afuera», recuerda la mujer.
Pese a estos amedrentamientos y el temor inicial, ambas dirigentas -que son parte del Movimiento por la Defensa de Laguna Verde- señalan que esto les entrega más fuerzas para seguir luchando por la causa medioambiental y las problemáticas que tiene la localidad. Ambos hechos ya fueron denunciados ante Carabineros.