Por Mirian Mondaca Herrera
Se destapó la olla -como se diría coloquialmente- del mercado del agua en Petorca, aunque -en rigor- en la zona ya era un secreto a voces entre sus habitantes. Solo que esta vez – a raíz de una investigación realizada por la académica de la Facultad de Arquitectura y Urbanismo de la Universidad de Chile, María Christina Fragkou, y la geógrafa Tamara Monsalve-Tapia, junto con los geógrafos Vicente Pereira-Roa y Maximiliano Bolados-Arratia, todos de la casa de estudios- se conoció la problemática a nivel nacional. El trabajo acaba de ser publicado en el mes de enero en la Revista Latinoamericana de Estudios Urbanos Regionales EURE.
El trabajo investigativo fue desarrollado en el marco de un Fondecyt Regular y se instala como el primer análisis integral de la distribución de agua potable mediante camiones aljibe en Chile, teniendo como caso de estudio una de las zonas más afectadas por la megasequía: la provincia de Petorca. En este trabajo, los investigadores analizaron el volumen, costo, trayectoria y los dueños de estos flujos de agua transportados en la provincia entre 2012 y 2018.
Sobre este estudio, María Christina Fragkou señaló a radio Universidad de Chile que “el propósito era ver cómo el Estado reacciona ante los impactos de la megasequía, y la consiguiente construcción de escasez de agua, entendiéndola como un fenómeno físico y social. Asimismo, quisimos analizar las soluciones propuestas y cómo estas transforman los territorios, así como su efectividad para paliar la escasez hídrica que viven las comunidades. Una de las cosas que nos interesó mucho fue analizar la tenencia de los derechos de agua y, particularmente para este estudio, nos enfocamos en cómo funciona la distribución de camiones aljibes, porque es un medio de distribución de agua potable muy importante para miles de familias. Hasta la fecha la academia no había estudiado este fenómeno con rigurosidad”.
Tras conocerse los resultados de esta investigación que evidencia que las aguas extraídas y vendidas fueron obtenidas del sector hidrogeológico donde existen familias que deben subsistir con, incluso, apenas 50 litros diarios por personas, el alcalde de Petorca, Ignacio Villalobos, enfatizó que es una situación que se debe investigar.
«Entre el 2008, 2012 y 2014, particularmente en Petorca podemos decir que se invirtieron cerca de 25 mil millones de pesos en compra de agua, versus la cantidad de obras que se ejecutaron, que fueron interiores a 6 mil, 5 mil millones de pesos. Hoy día estamos sobrepasando los 60 mil millones de pesos en compra de agua, versus la cantidad de recursos que se invierten para poder hacer obras de mejoramiento a las localidades, a las APR o los SSR hoy día. Eso significa que tiene que haber una investigación profunda, ver la cantidad de incremento que se ha desarrollado en el tiempo, en el costo que tiene un litro de agua (…) eso para mí es un delito, que tiene que ser investigado, que tiene que -además- ser analizado y volver a la esencia de cuáles van a ser las acciones correctivas a futuro».
El estudio
En el transcurso de la investigación, se analizó un total de 1.753 órdenes de compra de agua mediante camiones aljibe emitidas por la Gobernación Provincial de Petorca entre 2012 y 2018. De igual forma, se verificó el volumen y la localización de los Derechos de Aprovechamiento de Aguas de los proveedores del recurso hídrico y se entrevistaron a actores clave. Con la información que fue recopilada se pudo generar diagramas de distribución espacial de flujo de aguas y mapas donde se visualizan los metros cúbicos extraídos y repartidos dentro la provincia, según sector hidrogeológico.
Es importante señalar que la compra y distribución de agua potable por camiones aljibe, como medida de emergencia, se tramita principalmente con fondos de emergencia del Ministerio del Interior, a través de la Gobernación Provincial, quien repartió el 95% de los metros cúbicos de agua entregados y significó el 98% del gasto público en camiones aljibe en la provincia de Petorca.
Durante el período analizado, las operaciones de la Gobernación para la compra de agua potable y la contratación de su reparto en camiones aljibe en la provincia de Petorca movilizaron 1.494.492 m3 de agua, que implicaron un gasto total de más de $8.754 millones de pesos ($8.754.121.511) para abastecer a 41 localidades. El precio del agua, en tanto, fluctuó entre $2.500 y $17.000 por m3.
En Petorca, el agua repartida por camiones aljibe fue proporcionada por 23 proveedores que extrajeron agua de cinco Sectores Hidrogeológicos de Aprovechamiento Común (SHAC), recurso que finalmente fue distribuido dentro de estos mismos sectores y en otros seis de la provincia.
Según se lee en el estudio universitario, “destaca especialmente el SHAC Ligua Pueblo como aquel que proporciona la mayor cantidad de agua para su distribución por camiones aljibe mediante dos proveedores, y es -al mismo tiempo- el sector que mayor cantidad de agua ha recibido, 42 por ciento de la cual es proveniente del mismo sector. En este SHAC se encuentra circunscrita la localidad de Valle Hermoso, que ha sido abastecida durante el período de estudio por un total de 458.053 m3 y que destaca por encontrarse a pocos kilómetros de sus proveedores de agua por camiones aljibe”.
«Esta situación evidencia la dimensión social de la escasez hídrica en la zona, puesto que indica que más que una falta física de agua en las cuencas de los ríos Petorca y La Ligua existe una inequidad distributiva que afecta a los comités y cooperativas de APR. Nuestros resultados demuestran la creación de un mercado que se basa en los excedentes de agua que pueden tener ciertos actores, incluso en zonas de extrema sequía”, señaló María Christina Fragkou a radio Universidad de Chile.
Durante la investigación se analizó la situación de los cinco proveedores principales y fue posible identificar que al menos tres de ellos tienen derechos inscritos para uso agrícola. Además, durante el período estudiado, compraron Derechos de Aprovechamiento de Aguas. Esta situación se vuelve relevante al compararla con las cantidades de agua entregada por estos proveedores en cada año estudiado.
Los resultados indican que la venta de agua potable mediante camiones aljibe es una actividad rentable y dominada por pocos actores, y con una fuerte participación de empresas y particulares del sector agrícola, que es otra manifestación de la escasez hídrica de causas sociales en la provincia de Petorca.
Por último, para las y los investigadores la solución de la distribución de agua potable a través de camiones aljibes se basa en un mecanismo burocrático que implica un alto y constante esfuerzo administrativo, económico y operacional que no corresponde a una medida de emergencia que entrega un recurso vital. Al mismo tiempo, no logra satisfacer la demanda total de las localidades y cubrir el déficit hídrico de los usos afectados, ya que el consumo promedio repartido por persona ha llegado a ser 50 litros por persona al día, apenas el 30% del consumo promedio nacional de 170 litros por persona diario.
(Fuente: Universidad de Chile y radio Universidad de Chile).