Cada 24 de marzo se conmemora el Día Mundial de la Tuberculosis, en recuerdo a la jornada en que el Dr. Robert Koch comunicó a la comunidad científica que había descubierto el agente transmisor de la enfermedad: el microbacterio tuberculoso.
En ese marco, desde el Servicio de Salud Viña Quillota, destacaron que como red de salud se ha abordado la enfermedad y su tratamiento desde sus orígenes. De hecho, en la propia red, en el Hospital Juana Ross de Peñablanca, se fundó el primer sanatorio para tuberculosos en la región, en el año 1912.
La importancia de tratar y detectar la enfermedad es de suma importancia para los equipos de salud, ya que existe la errónea premisa en la opinión pública que esta enfermedad podría estar erradicada, lo que no es así. Ello implica que cuando se detecta un caso, se genera revuelo en las comunidades involucradas, ya que falta información preventiva y educativa en torno a esta enfermedad, su tratamiento y recuperabilidad.
Desde la red del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota señalan que el desafío de su abordaje ha sido permanente y en constante crecimiento, dadas las exigencias que establece el crecimiento de la población y la necesidad de educar e informar a las comunidades.
Baja incidencia de la red SSVQ
Al respecto, la referente del Programa de Tuberculosis del Servicio de Salud Viña del Mar Quillota, Dra. María Eugenia Pérez señala: “La situación como SSVQ es una situación, en rigor, buena, porque tenemos una de las incidencias más bajas del país. Pero eso no significa que no intervengamos, que no invirtamos, como dice el lema, para eliminar la tuberculosis como problema de salud pública. Afortunadamente, el Servicio de Salud Viña del Mar Quillota con el esfuerzo del equipo técnico y de toda la red, que son casi 90 centros de salud de la red más los 10 Hospitales, considerando el Hospital Dr. Gustavo Fricke y todos los Hospitales de la red, trabajan en la detección, en el tratamiento y en la prevención de los contactos de los casos que nosotros notificamos
«.
Laboratorios de punta en la red SSVQ con pruebas moleculares
Sobre la infraestructura disponible en la red, la Dra. Pérez, destaca: “Contamos en el Servicio de Salud Viña del Mar Quillota con dos laboratorios con tecnología de punta con pruebas moleculares. Nosotros hacemos una prueba que está haciéndose en Chile desde 2018 que es el GeneXpert, prueba molecular de detección rápida del microbacterio tuberculoso, esta prueba está lista en 2 horas. Necesitamos crecer más en laboratorio para aprovechar al máximo la cantidad de pruebas diagnósticas que nosotros podemos hacer en el año. Tenemos un tratamiento que fuimos pioneros, lo empezamos a actualizar en el 2019, un tratamiento diario por 6 meses que actualmente está publicado en la norma técnica de Programa Nacional de Control y Eliminación de la Tuberculosis. Y fuimos piloto en el año 2019 del tratamiento preventivo de la tuberculosis con un esquema que también norma la guía nueva como nuestro esquema de prevención, que es un esquema acortado, semanal, isoniazida rifapentina; que sea semanal acorta de 180 a 12 dosis, y eso implica mejores resultados y mayor adherencia”.
Respecto de los desafíos sobre la pesquisa de la tuberculosis en nuestra población que se ha visto impacta por la pandemia, la Dra. María Eugenia Pérez destaca: “Nos falta mejorar nuestra pesquisa, pero tenemos buenos resultados y esperamos ofrecerle a la comunidad más prevención, que es lo que impacta sobre la incidencia y que nos entiendan en la protección de nuestros niños y niñas, contactos de casos índice, y que nos entienda la comunidad que tenemos que hacer tratamiento preventivo muchas veces. Es mejor prevenir una enfermedad que tratarla
«.
“El país tiene una incidencia entre 13 y 15 casos por 100 mil habitantes y nosotros tenemos 7.5, digamos hasta 8, pero estamos bajo 10 y es muy buen estándar, a nivel global, a nivel mundial de casos por 100 mil habitantes. Nuestra baja incidencia se debe a que en los últimos 10 años, hemos sido un equipo técnico muy presente. El equipo técnico es el impulsor de que la red diagnostique, prevenga, trate, y siempre estamos muy entusiasmados con el trabajo de nuestra red, hacemos capacitaciones. Yo creo que eso ha contenido la incidencia»
, añadió.
“Que tengamos un número bajo no significa que las acciones no las tengamos que hacer, por el contrario, hay que intensificar la búsqueda, hay que pensar que las pruebas diagnósticas que hacemos son pocas, entonces puede ser un número que si bien es cierto en realidad se va a mantener bajo 10, pero quizás sea más que 7.5”
, indicó también la referente.
La prevención es fundamental a la hora de evitar contraer la enfermedad y ello implica la mayor información y difusión posible en las comunidades: “Para prevenir, hemos hecho presente el caso presuntivo de tuberculosis, y nuestros médicos, nuestras enfermeras tienen que estar atentos al caso presuntivo de tuberculosis, que es el paciente que tiene tos, expectoración, por un periodo de dos semanas, pero que además, o tienen baja de peso o tiene sangramiento por la tos, que nosotros llamamos hemoptisis, pero pertenece a un grupo de riesgo, y ahí es donde hay que focalizar la búsqueda de tuberculosis”, destaca la Dra. Pérez.
¿Cuáles son los grupos de riesgo? La Dra. Pérez señala que «las personas con alcoholismo, drogadicción, que son situaciones que tenemos con bastante frecuencia y ahí empiezan a bajar a factores que son endémicos en la población. La edad avanzada, la diabetes, el ser insuficiente renal, la desnutrición, son factores que van a propender a la tuberculosis, pero en rigor: adulto mayor, alcoholismo. Ahí están los nichos y donde tenemos que buscar la tuberculosis».