Eran pocas las apuestas tendientes a que Chile obtendría un buen resultado frente a la Selección de Qatar. Y no porque la Roja enfrentaba a una potencia futbolística, pues las razones de no contar con muchas esperanzas de ganar esta tarde en el «Franz Horr» Stadion de Viena, Austria, pasaba más en que el equipo de Eduardo Berizzo no juega bien.
Es cierto que el entrenador argentino asumió el banco chileno hace poco, pero también es acertado decir que el exayudante técnico de Marcelo Bielsa cuenta con la experiencia internacional suficiente para armar un equipo competitivo. Más si conoce bien el fútbol de nuestro país, él fue el DT de ese O’Higgins que estuvo a punto de ser campeón del torneo de apertura en 2012 al perder en una finalísima con Universidad de Chile.
Hoy la Roja jugó un poco mejor que con Marruecos, pero se debe considerar que si bien Qatar participará en el Mundial, al ser equipo del país anfitrión, los árabes no cuentan con jugadores de los pergaminos de Arturo Vidal, Alexis Sánchez y Gary Medel.
Si Berizzo quiere seguir a cargo de la banca chilena tendrá que exigir y exigirse más, no puede llamar a jugadores que hace rato no brillan como Juan Delgado y Ángelo Henríquez; y debe probar con futbolistas jóvenes —en partidos amistosos— como Darío Osorio y Lucas Assadi, de la U; Vicente Pizarro y Joan Cruz de Colo Colo; y Clemente Montes e Ignacio Saavedra de la UC, por nombrar algunos.
El primer gol llegó del pie de Alex Sánchez, a los 36 minutos del primer tiempo. Sin embargo a los 59′ del segundo lo empató Akram Afif. Ocho minutos después Hassan Al Aydos puso a los qatarís el marcador arriba a su favor (2-1).
A los 77′ Arturo Vidal salvó a Chile de un bochorno aún peor (2-2).
Cuando se acababa el lance Alexis Sánchez desperdició un penal.
Fotografía: AFP.