Tras una serie de conversaciones producto de las movilizaciones desplegadas por los sindicatos de pescadores de la bahía de Quintero, respecto de los problemas sanitarios y de producción pesquera que llevan años enfrentando por su condición de Zona de Sacrificio, la delegada presidencial de Valparaíso, Sofía González, valoró los acuerdos a los que llegaron junto a los subsecretarios de Medio Ambiente y de Pesca, Maximiliano Proaño y Luis Lobos, respectivamente, sumado al gobernador regional Rodrigo Mundaca, para instalar una mesa de trabajo para superar la crisis.
«Hemos llegado a un acuerdo con los sindicatos de la bahía de Quintero-Puchuncaví. Este acuerdo dice relación con la instalación de una mesa de trabajo ejecutiva, que tenga como principal objetivo abordar de manera transversal las demandas planteadas por los pescadores. Estas necesitan de la sinergia de variados esfuerzos, tanto del poder legislativo, ejecutivo y del Gobierno Regional», expresó la autoridad.
Es por eso que, sostuvo, «establecimos plazos y principales temas a tratar, siempre desde el prisma del trabajo colaborativo. Como Gobierno, hemos reafirmado nuestro compromiso en la búsqueda de soluciones que sean de fondo y que logren caminar hacia una recuperación social y económica justa».
Cabe notar que mediante declaración pública los mentados sindicatos comunicaron que «queremos comunicar a la población y a los medios de prensa, que los pescadores artesanales de la bahía Narau nos declaramos en estado de alerta y movilización. Le exigimos al Gobierno de Gabriel Boric que nos dé una respuesta en un plazo de 24 horas. A la carta que le hicimos llegar de forma directa y por sus intermediarios en la delegación presidencial de Valparaíso, hace un mes y medio, frente a las problemáticas que nos aquejan y que a la fecha son insostenibles en la bahía de Quintero».
Demandas y acusaciones
Fuentes a La Región Hoy expusieron que «el 14 de septiembre volvimos a presenciar un derrame de sustancias oleosas altamente contaminantes, cuestión que fue confirmada por un bote con miembros de la federación de pescadores que alertaron del siniestro. El derrame fue constatado por GNL y la capitanía de puerto, episodio en que el buque Global Stars figura como responsable de verter estos residuos consecuencia del averió de una maquina lavadora de gases (scrubber) encargada de filtrar y neutralizar gases contaminantes. Una vez más se evidenció que los protocolos de contención son un saludo a la bandera. El mar que es de todos, se contamina y las empresas quedan impunes».
«No vamos a aguantar que nos sigan mirando como ciudadanos de segunda, queremos una compensación histórica para la población de Quintero y la pesca artesanal, por lo que exigimos: eliminación del impuesto específico de la bencina en las comunas de Quintero, Puchuncavi y Horcón. Zona franca energética para el pueblo de Quintero, localidad por donde pasa el 80 % de los hidrocarburos que alimentan la zona central de Chile», declaran los demandantes.
Sostienen: «Detener de forma inmediata la instalación de la planta desalinizadora en la bahía de Quintero. Planta que hace un daño irreversible al medioambiente y a la biosfera marina, afectando directamente nuestra fuente de trabajo. Este gobierno, al igual que los anteriores, usan las comunas populares como el patio trasero para los intereses empresariales. No lo permitiremos».
«Frente al escenario económico que vive el país y la situación de los pescadores artesanales, exigimos una jubilación mínima de 650 mil pesos para los pescadores artesanales de Quintero para hacer frente al alza del costo de la vida que azota a todas las familias del país», añaden.
«Ante la contaminación estructural en la zona, detención inmediata de actividades en industrias que no poseen RCA. Las medidas ambientales tomadas a la fecha dejan impunes a la empresa privada que se enriquecen acosta de contaminar a trabajadores y niños de la zona. Los pescadores artesanales hemos estado abiertos a dialogar, pero si se nos ignora, no dudaremos en movilizarnos por lo justo, por nuestras familias y por la población trabajadora. ¡Nunca mas solos!», cierran.