El Instituto de Salud Pública (ISP) autorizó el uso de emergencia de las vacunas bivalentes contra COVID-19 de los laboratorios Pfizer y Moderna, a partir de los 12 y 18 años, respectivamente.
Los expertos del ISP, que integran el Comité de Expertos de Evaluación de Vacunas, junto con destacados profesionales externos, analizaron los antecedentes de seguridad y eficacia presentados por ambos laboratorios.
La diferencia de los grupos etarios para ambas vacunas, se basó en la información clínica de seguridad y eficacia presentada por los laboratorios, las distintas dosis de cada vacuna, y las aprobaciones de agencias de referencia internacional, como la EMA y la FDA.
Las vacunas bivalentes contienen una combinación del código de ARN de la cepa original o Wuhan de la COVID-19 y la variante Ómicron, específicamente el linaje BA.1.
Es importante destacar que esta variante es la predominante a nivel mundial. Las vacunas monovalentes, por su parte, que son las que se han aprobado con anterioridad, cuentan exclusivamente con la información genética de la cepa original.
El director (s) del ISP, Heriberto García, destacó que «a aprobación de estas vacunas permite al Ministerio de Salud contar con una nueva herramienta que se suma a las vacunas monovalentes, que han permitido reforzar la inmunidad de la población contra el COVID-19. Cabe recordar que la utilización de estas vacunas, en el marco del Programa nacional de Inmunización, están sujetas a la evaluación y recomendaciones emanadas desde del Comité Asesor en Vacunas y Estrategias de Inmunización (CAVEI) y del Ministerio de Salud, según las necesidades epidemiológicas en distintos grupos objetivos».