Las algas pardas, recurso hidrobiológico que se encuentra presente en las costas chilenas entre las regiones de Arica y Coquimbo, requiere de una especial labor de conservación, tanto en los sitios donde se encuentra, por su importancia para los ecosistemas, como también en su cadena de valor como recurso productivo. Debido a su rol estructurador de ambientes marinos, son utilizadas por otras especies como zonas de alimentación, reproducción y reclutamiento; además de realizar un importante aporte en la absorción de CO2.
Por esta y otras razones, las algas pardas se encuentran en estado de veda extractiva, ante lo cual el Servicio Nacional de Pesca y Acuicultura (Sernapesca), ejecuta una serie de programas y planes tendientes a la conservación de las algas pardas en la macrozona norte, con el objetivo de garantizar su existencia y permitir su aprovechamiento de manera sustentable. Uno de los ejes en el que se realiza una intensa labor es la fiscalización de la cadena de valor; verificando que la extracción, transporte, almacenamiento y comercialización del recurso se haga de acuerdo a la normativa vigente.
En tal sentido, funcionarios de la Dirección Regional de Antofagasta de Sernapesca, acudieron hasta el sector de Los Chorales, al norte de Caleta Constitución, en la Península de Mejillones. En el lugar se detectó el procesamiento de alga en evidente estado de haber sido barreteada, esto es, extraída con herramientas como barretas o chuzos.
Fue así que se incautó la cantidad de 3.24 toneladas de huiro negro seco, correspondientes a 11.60 toneladas en su estado natural. El representante legal de la planta fue citado al tribunal correspondiente, por la compra y procesamiento de alga en veda, además de citar a los agentes recolectores.
“El barreteo, como acción de extracción del recurso está prohibida en la región de Antofagasta, ya que la zona está regulada por el Plan de Manejo de Algas Pardas, siendo autorizada solamente la recolección de alga varada en las playas. Por esta razón, es sumamente importante reforzar la fiscalización de toda la cadena de valor de las algas pardas, con el fin de garantizar la conservación de este recurso”, mencionó Pilar Irribarren, directora regional de Sernapesca Antofagasta.
Las recientes labores de fiscalización en la zona, generadas en su mayoría por denuncias ciudadanas, se complementan con las diferentes herramientas que posee el Servicio para tales efectos, incluyendo el uso de elementos tecnológicos de última generación para la vigilancia. Según Irribarren, “el hecho de contar con tecnología de punta nos permite mejorar nuestro trabajo en terreno, ya que facilita la fiscalización en sectores de complejo acceso por carretera existentes en la región. De esta forma, nuestro compromiso por la conservación de las algas pardas, se renueva en forma permanente”.
En ese sentido, uno de los ejemplos de la modernización en la fiscalización, se encuentra en la implementación del Plan Piloto de Trazabilidad de Algas en la Región de Atacama. Este sistema permite a los usuarios realizar la declaración de origen de algas pardas sin necesidad de contar con conexión a internet, además de hacer el seguimiento del recurso desde la caleta hasta el destino final.