Son 18 neveras que fueron donadas por la comunidad taiwanesa y están siendo entregadas a través de los equipos municipales.
Durante la semana pasada, equipos municipales liderados por la alcaldesa Valeria Melipillán, visitaron diferentes ollas comunes que trabajan en las juntas de vecinos de las poblaciones que se vieron afectadas por el incendio, con el objetivo de entregar congeladores y así mejorar la preservación de alimentos.
La jefa comunal visitó la olla común en la Iglesia Visión Mundial para la Familia en Valencia Alto, lugar en el que entregan 180 raciones diarias y que la incorporación de un congelador será esencial para la conservación de verduras y proteínas, y así asegurar la cadena de frío.
Además, la alcaldesa aprovechó la instancia de hacer un llamado a la comunidad para continuar con la donación de alimentos, señalando que “se necesita mucho aporte de proteína, verduras, pancito, de colaciones. Hoy en día hay muchas ollas comunes que están esperando esa alma solidaria que pueda acompañarlas”.
Por su parte, los vecinos se mostraron preocupados por la escasez de donaciones de alimentos, que los han obligado a reducir su cobertura de comidas. “Necesitamos todavía de mucha ayuda, por ejemplo, nosotros dábamos desayuno, almuerzo y once, pero ahora ya nos llega pan, así que solamente estamos entregando el almuerzo”, indican quienes forman parte de la hermandad de la iglesia.
Miguel Cabrera es encargado de la olla común y acopio en la Junta de Vecinos Nuevo Horizonte. Hasta el día de la entrevista suma 48 días trabajando desde la emergencia y aprovechó la visita de los equipos municipales para agradecer al municipio “por acercarse y por traernos estos freezers, y la verdad que sirve bastante para mantener los alimentos congelados”.
Desde el Municipio Abierto continuarán las ayudas a las ollas comunes, entendiendo que son esenciales para continuar con los trabajos que requiere la emergencia.