La Cámara de Diputados despachó a ley el proyecto que establece nuevas regulaciones a la realización de funerales de alto riesgo. La iniciativa fue aprobada con 128 votos a favor y dos abstenciones.
La nueva ley redujo la duración del velorio a 24 horas, y ya no se permitirá elegir el lugar del velorio. El cuerpo será trasladado directamente desde el lugar de fallecimiento o del Servicio Médico Legal al cementerio, donde se llevará a cabo cualquier acto relacionado con el velorio. Además, el recorrido será supervisado y autorizado por Carabineros, evitando que se realicen recorridos no autorizados, como sucedía anteriormente.
“En lugar de «naturalizar» los incidentes que ocurren en estos funerales, la ley establece sanciones más severas en caso de que se produzcan alteraciones del orden público durante el evento”, explicó la Ministra del Interior Carolina Tohá.
«Algunos elementos que fueron modificados en el Senado y, provocan una sobrecarga la labor de Carabineros. No se debe hacer a Carabineros el principal responsable de las autorizaciones; esa tarea debe recaer en la autoridad política, es decir, en las delegaciones», manifestó el diputado Andrés Longton (RN).
Por su parte, el diputado Jaime Araya (Ind.-PPD) defendió el proyecto, asegurando que «no es justo decir que lo que estamos haciendo es validar o legalizar los narcofunerales». Aseguró que algunos sectores de la derecha parecen favorecer el caos en las calles, la proliferación de estos funerales, el cierre de colegios públicos y la suspensión de servicios de salud.
«Si la derecha realmente cree que eso es lo que quiere la ciudadanía, deberían decirlo abiertamente, porque no les importa la seguridad (…) Podrán criticar el proyecto y señalar que es perfectible, pero no tienen derecho a cuestionar el trabajo de la ministra del Interior, quien está comprometida con los temas más importantes para el país», afirmó Araya.