Un acto vandálico que afectó al recién restaurado edificio porteño que albergó hasta 2017 al icónico Bar Inglés, cuya fachada por la calle Blanco ya fue arruinada por desconocidos que pintaron un grafiti de grandes dimensiones, que cubre prácticamente todo el primer piso.
El inmueble, que data de 1866 y que sufrió un grave derrumbe en mayo de 2021, fue foco de una millonaria recuperación encabezada por el abogado Ignacio González López y un familiar, quienes se preparan para abrir nuevamente sus puertas en un mes.
Frente a esta situación, la alcaldesa Camila Nieto (FA) precisó que, para evitar estas incivilidades, también se necesita la cooperación de la ciudadanía: «Nuestros equipos de seguridad tienen el mandato de fiscalizar este tipo de conductas, pero la invitación es a que todos y todas encendamos las alarmas para evitar que estas situaciones ocurran».
Agregó que «desde la municipalidad nos esforzamos y esmeramos por tener un Valparaíso limpio y ordenado, y por ofrecerle al sector privado las condiciones para que invierta en el reacondicionamiento y la mejora de sus propiedades».
Junto con rechazar el acto vandálico, la vicepresidenta de la Comisión de Educación, Arte, Cultura, Deporte, Recreación y Patrimonio Cultural del Core, Paula Rosso (FA), afirmó que es clave la recuperación del espacio público para evitar estas incivilidades, por cuanto «en la medida en que los edificios del plan de Valparaíso vayan siendo hermoseados, las calles más iluminadas y se recupere el movimiento, se alejará el vandalismo».