La Contraloría General de la República detectó serias irregularidades en el manejo de drogas incautadas al interior de recintos penitenciarios de la Región de Valparaíso, tras constatar incumplimientos en los plazos legales para su entrega a la autoridad sanitaria.
La situación quedó en evidencia luego de un proceso de fiscalización que encendió las alertas por eventuales riesgos en la cadena de custodia de estas sustancias.
De acuerdo con el informe final del organismo fiscalizador, las observaciones afectan a los centros de cumplimiento penitenciario de San Antonio, Valparaíso y Quillota.
En los dos últimos recintos, si bien se realizaron entregas al Servicio de Salud Valparaíso–San Antonio, estas fueron parciales y presentaron observaciones relevantes, lo que impidió dar cumplimiento íntegro a la normativa vigente.
Las irregularidades se confirmaron tras una visita inspectiva, donde se verificó la existencia de múltiples cadenas de custodia con drogas almacenadas por períodos superiores a los permitidos.
En varios casos, la antigüedad de las incautaciones dificultó incluso su correcta verificación, situación que fue consignada por Contraloría como una falencia grave en los procedimientos internos.


















