La encuesta Pulso Ciudadano evidenció una muy leve variación en la la aprobación del Presidente Gabriel Boric en el verano 2023, en una consulta hecha luego de la emergencia de los incendios forestales que afectan la zona centro sur del país.
De los 816 encuestados por el estudio, un 59,3% desaprueba su gestión, lo que no demuestra gran diferencia en los resultados de enero de este año (60,7%), mientras que un 26,9% valora su labor (26,1% en enero).
Respecto a los siniestros, en especial en las regiones de Ñuble, Biobío y Araucanía -situación que ha consumido 458 hectáreas esta temporada- la percepción positiva de la gestión del Gobierno es de un 33,8% (bueno o muy bueno), la negativa es de 31,2% (malo o muy malo), aunque la mayoría cree que ha sido un desempeño regular (35%). En tanto, el gabinete ministerial de Boric cuenta con una percepción negativa de 64%, un positiva de 21,3%, aunque luego de tener un alza de cuatro puntos respecto a la aprobación de enero (17,3%).
Por otra parte, el poder del Estado que mayor desaprobación tiene es el Judicial, el cual cuenta con un 77,5% de percepción negativa y solo un 10,2% positiva. Luego le sigue en Congreso Nacional, con un 74,4% de desaprobación y un 10% de buena apreciación. Prioridades de la ciudadanía La delincuencia sigue siendo el problema más importante para los ciudadanos con 52,7%. Le sigue la inflación y el alza de los precios, con un 33,1%.
Luego aparece la inmigración con un 25% y, como cuarto punto (subió respecto al estudio de enero), se encuentra el narcotráfico con un 19,3%. La economía bajó en este ranking ya que en enero de 2023 obtuvo un 19,1% de las preferencias, pero esta vez solo el 14,4%. También lo hizo el ítem “sueldos” que disminuyó de 18,6% a 14%.
A días de que comience a funcionar la Comisión Experta –6 de marzo- de 24 miembros que redactarán un ante proyecto de Constitución para que el Consejo Constitucional trabaje sobre este, los ciudadanos demostraron su poca atracción por el proceso. Así, un 40,3% está nada o poco interesado en el desarrollo de la redacción de una nueva Carta Magna. Un 36,2% está muy o sólo interesado y el 23,5% declara estar medianamente interesado.