Con 69 votos a favor y 78 en contra, la Cámara de diputados rechazó la procedencia de la Acusación Constitucional contra el Ministro de Educación, Marco Antonio Ávila. El libelo se entiende como no interpuesto.
Tanto la Democracia Cristiana como Evópoli rechazaron la acusación, lo que terminó por inclinar la balanza a favor del secretario de Estado.
La acción se dio en medio de fuertes acusaciones de homofobia por parte del oficialismo en contra de la derecha, a quienes acusaron de usar la sexualidad del Ministro para atacarlo políticamente.