Dentro de los balances, lo peor evaluado fue el costo de la vida. Para el 86,7% estamos peor que el año pasado. En cuanto a la proyección para la economía chilena, cerca de la mitad de los encuestados cree que esta será igual o peor.
La encuesta del Centro de Políticas Públicas de la Facultad de Economía y Gobierno de la Universidad San Sebastián (USS) arrojó que para un 53,8% de los encuestados la situación económica personal es peor que el año pasado. El porcentaje asciende a 62,9% en la evaluación a nivel país.
En ese contexto, un 69% destinará menos presupuesto a las fiestas de fin de año. Dentro de quienes se inclinaron por esta opción un 27,9% señaló que deberá ajustar el bolsillo con menos regalos o menos costosos; 3,8% con una cena más sencilla; un 2% no se desplazará a ver a familiares y un 66,2% hará ajustes en estos tres ítems.
“2023 fue un año mediocre para nuestra economía. Según el IPoM de diciembre, publicado por el Banco Central, cerraremos el año con nulo crecimiento y con una inflación más persistente de lo pensado, que ya acumula un 4,5% a noviembre. La inversión se contrajo y el desempleo se mantiene por sobre el promedio histórico, con un 8,9% de desocupación y un déficit de más de 450 mil puestos de trabajo. Los ingresos monetarios de los hogares cayeron (CASEN) al igual que los ahorros”, analiza Alejandro Weber, decano de la Facultad de Economía y Gobierno de la USS.
Weber agrega que “todo esto se combina para mostrar que nuestra economía va por un camino lleno de obstáculos, la mayoría autoconstruidos. Para enmendar el rumbo es necesario retomar el crecimiento económico, recuperar los empleos, fortalecer nuestro mercado laboral y hacer más eficiente el rol redistributivo del Estado. Al mismo tiempo, la encuesta muestra que las prioridades ciudadanas están en resolver los problemas de seguridad pública y empleo, lo que debiera transformarse en una prioridad de las autoridades, ambas fundamentales para volver a crecer con equidad”.
Sobre el origen del presupuesto para las fiestas, un 54,8% señaló que viene de su sueldo, seguido de créditos o tarjetas (10%), ahorros (9,8%), otros (9,2%), aguinaldo del empleador (8,2%) y recursos que provienen de apoyo familiar (8%).
Con respecto al gasto para Navidad y fin de año al que se destinan más recursos, encabezaron las preferencias la compra de regalos (46.5%) y la cena de Navidad (32,5%).
Seguridad y empleos lideraron los deseos de regalos para el país
Ante la pregunta si de usted dependiera mejorar la calidad de vida de las personas en Chile, ¿qué regalo les daría en esta Navidad? Un 33,4% escogió mayor seguridad pública; un 28,7% más y mejores empleos y un 10,3% mejor calidad de la educación. También aparecieron entre las opciones mejores pensiones (9,8%) y mejor calidad de la salud (5,3%).
Frente a la opción de elegir un solo regalo para entregar a las autoridades y políticos del país, un 29,8% les regalaría capacidad de gestión para resolver problemas; un 15,1% foco para priorizar los problemas más urgentes y un 14,9% un claro diagnóstico de la situación país.
Al especificar un obsequio para el presidente de la República, 28,7% de los encuestados le regalaría capacidad para solucionar los problemas; 17,2% credibilidad y un 16,4% experiencia. Otras opciones elegidas fueron autoridad (10,5%), capacidad para dialogar y generar acuerdos (8,7%) y liderazgo (6,9%).
Navidad marcada por la división
Al pedirle a los encuestados que imaginaran a Chile como una gran familia y que se sentaran todos los chilenos en una mesa para celebrar la cena navideña, para el 65,4% el ambiente en esta instancia sería “muy confrontacional” o “algo confrontacional”, dejando en una minoría la percepción de una celebración “muy dialogante” o “algo dialogante” (17,1%).
Con respecto a qué tan unida o dividida sería esa cena, el 69,2% se inclinó por la opción «muy dividida” o “algo dividida”. Solo para el 15,7% sería “muy unida” o “algo unida”.
Balances y proyecciones
Un 46,5% de los encuestados manifestó que enfrenta esta Navidad y las fiestas de fin de año con menos esperanza que el año pasado. Una de las mayores preocupaciones en este momento es el temor por la delincuencia y la inseguridad del país, opción escogida por el 40,2%.
Sobre el análisis de los puntos de mejora y retroceso durante 2023, lo peor evaluado fue el costo a la vida, para el 86,7% estamos peor que el año pasado y un reducido 2% opina que estamos mejor en ese punto. Le siguen crimen organizado y narcotráfico, problemática frente a la cual un 84,8% de los encuestados considera que estamos peor que hace 12 meses. El tercer aspecto peor evaluado fue la calidad de la política, con un 83,8% de personas que sienten que empeoró en 2023.
Dentro de las proyecciones, el panorama económico para los encuestados es incierto. El 33,3% cree que será peor en la Navidad 2024; para el 20,8% será igual y un 21,2% apuntó que será mejor. La encuesta también arrojó un 24,6% de personas que se inclinó por la opción no sabe/no responde.
Para Felipe Bettancourt, investigador del Centro de Políticas Públicas de la USS, “esta encuesta muestra cómo los problemas económicos y políticos están empañando incluso nuestras celebraciones familiares. Estamos cerrando 2023 en medio de una economía debilitada y con un país dividido. Vemos una demanda creciente de acción decisiva por parte de nuestras autoridades. Es imperativo recuperar nuestra capacidad de ahorro y tomar medidas concretas para reimpulsar el crecimiento económico. No solo para mejorar nuestros indicadores, sino para crear un entorno más favorable para las familias chilenas en 2024”.
Revisa los resultados de la Encuesta Chile Nos Habla aquí.