El senador José Miguel Insulza, manifestó su preocupación por la situación que enfrentan las familias afectadas por el megaincendio de febrero de 2024 en Viña del Mar, tragedia que dejó miles de damnificados y una herida abierta en la ciudad que, a casi 21 meses, aún no logra cerrarse.
En un comunicado público, Insulza relató que recientemente se reunió con vecinos que perdieron sus hogares, quienes hoy viven un drama cotidiano marcado por la angustia, problemas de salud mental y sensación de abandono. “El Estado no puede mirar hacia otro lado”, expresó el parlamentario, enfatizando que las familias no solo esperan soluciones materiales, sino también un acompañamiento real del municipio y las instituciones.
Por ello, el senador informó haber solicitado una reunión con la alcaldesa Macarena Ripamonti, para llevarse a cabo “antes o después del 16 de noviembre”, con el propósito de buscar fórmulas de colaboración y acelerar los procesos de reconstrucción. Sin embargo, hasta ahora, la jefa comunal no ha entregado respuesta, pese a la urgencia de la situación y la disposición del senador a coordinar apoyos desde el nivel central.
“Se requiere voluntad política y trabajo conjunto.
No se trata de colores partidarios, sino de empatía y eficiencia frente a un drama humano que ya se extiende por casi dos años”, subrayó Insulza.
El parlamentario también anunció que solicitará una reunión con la contralora general de la República, Dorothy Pérez, para conocer el estado de las auditorías sobre los recursos destinados a la reconstrucción. “La transparencia y la acción coordinada son esenciales para que la ayuda llegue donde más se necesita”, recalcó.
El llamado del senador se da en un contexto de creciente malestar ciudadano frente a la falta de avances en la reconstrucción y la escasa comunicación del municipio con los damnificados. Insulza ha insistido en que la reconstrucción de Viña del Mar requiere liderazgo, empatía y coordinación interinstitucional, comprometiéndose a ser un puente efectivo entre las familias, el Estado y los organismos fiscalizadores.
Con esta gestión, José Miguel Insulza reafirma su compromiso con las familias afectadas y con el deber del Estado de responder con eficiencia y humanidad ante las emergencias. La experiencia alcanzada en las más altas responsabilidades de Estado es hoy garantía de un trabajo serio, responsable y con resultados concretos, que es precisamente lo que la ciudadanía espera. A toda la sociedad le duele esta tragedia, pero es hora de actuar con experiencia y trabajo serio para que las familias sean debidamente reparadas en todo el daño causado.




















