En promedio, los adultos en Chile aumentan entre 3 y 5 kilos durante el invierno. Esto es especialmente preocupante si consideramos que un 75 por ciento de su población tiene sobrepeso u obesidad, siendo el país con más casos de este tipo entre los países miembros de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
“Durante el invierno, el aumento del frío provoca que el cuerpo busque mantenerse en equilibrio para seguir funcionando, buscando formas de obtener energía y mantener así su temperatura”, explica la nutricionista de Clínica Los Carrera, Carla Novoa.
Y agrega: “Por eso, muchas personas sienten la necesidad de comer dulces o harinas blancas. Sin embargo, hay que estar atentos. Los alimentos muy calóricos y en mayor cantidad, no nos proporcionan los nutrientes que nuestro organismo necesita y además nos hacen subir de peso. No hay que comer de más, hay que comer distinto”.
Esta situación empeora tomando en consideración que, de acuerdo a la Encuesta Nacional de Salud, el 80% de los chilenos es sedentario. “Esto ha repercutido con las alzas de sobrepeso en nuestro país, es decir, esto se suma a una sobre ingesta de alimentos calóricos, azúcares simples, harinas refinadas, grasas trans, entre otros alimentos que son perjudiciales para nuestra salud. Hay un aumento en la ingesta calórica, y un bajo gasto energético”, asegura la especialista.
¿Cómo enfrentar el invierno?
Si bien es efectivo que en invierno el cuerpo necesita calorías extras para enfrentar el frío, lo cierto es que estas deben ser buenas calorías para que beneficien al organismo. “Es por ello que confundimos el concepto de que en invierno debemos comer más, y en consecuencia aumentamos de peso”, enfatiza la nutricionista.
Para poder bajar la ansiedad de comer de forma abundante, la mejor opción es realizar ejercicios y mantenerse activo durante esta época. La actividad física no solo contrarresta el aumento en la ingesta de calorías, sino que también mejora el ánimo y el sistema inmune, reduciendo el porcentaje de sedentarismo en Chile. Asimismo, Carla Novoa recomienda fraccionar los tiempos de comidas cada tres horas, y así evitar los atracones entre comida y grandes ingestas.
La especialista asegura que una alimentación equilibrada en invierno debe considerar alimentos de aporte energético provenientes de hidratos de carbono complejos tales como cereales, papas, legumbres frescas y secas, además de frutas y verduras. Añade que los alimentos altos en fibra permiten mantener el frío al margen y producen sensación de saciedad. “La fibra no solo se encuentra en las frutas y verduras, sino que también en los cereales integrales, y granos como las semillas y frutos secos”, anota.
Con respecto de consumo de vegetales, señala que no sólo se pueden consumir como ensaladas, sino que estos se pueden consumir a través de cremas de verduras, en salteados, budín, guisos con proteínas, entre otras preparaciones.
Y para evitar el aumento de peso, la nutricionista de Clínica Los Carrera recomienda:
Realizar actividad física en casa. Los ejercicios de peso son más eficientes a la hora de quemar calorías, este es un factor de suma importancia para mantenernos saludables y evitar el aumento de peso.
Llevar una alimentación equilibrada.
Aumentar el consumo de proteínas, ya que logran mayor saciedad, contribuyen con la pérdida de masa grasa y atenúa la pérdida de masa magra.
Beber al menos 2 litros de agua.
Reducir el consumo de embutidos como cecinas, pates, salame, etcétera.
Reducir el consumo de azúcares simples como snacks, galletas, y preferir endulzantes como stevia, tagatosa, alulosa.
Preferir lácteos descremados.
Evitar el consumo de alimentos ultraprocesados y con sellos.