Por Joaquín Torres Tagle
@Region_hoy
Una vez revelados los nombres de los candidatos para el Consejo Constitucional que se elegirá el próximo 7 de mayo, uno de los más conocidos fue el del ex diputado socialista Marcelo Schilling, que postulará para representar a la Región de Valparaíso en el nuevo proceso constituyente.
El histórico militante PS expone sobre que una nueva constitución debe contar con un mayor número de derechos sociales garantizados, una institucionalidad que tenga pesos y contrapesos para la mantención de la vida democrática y la oportunidad de establecer lineamientos que permitan mayores castigos para delitos ambientales y económicos.
¿Qué lo llevó a aceptar una nueva candidatura después de una extensa trayectoria en el parlamento?
Estaba lleno de dudas de aceptar esta candidatura, ya había tomado otro rumbo después de haber sido diputado por 3 periodos y un año en donde reemplacé a Juan Bustos como parlamentario, osea 13 años en total. Incluso hice una rendición de cuentas bajo la forma de un libro de manera de poder informar a quien se interese de mi acción como diputado. El país está en la situación que está, desde 2019 que se viene bregando por una nueva constitución, una aspiración importante de la ciudadanía. Después de 55 años de trayectoria política ligada al Partido Socialista, dado este proceso (constituyente) que es un continuo, me palabrearon bastante, me hablaron, terminé aceptando el desafío, que no es una cosa sencilla.
¿Qué ideas y principios defenderá en el Consejo Constitucional en caso de ser electo?
En primer lugar hay que reafirmar lo que son los postulados clásicos respecto de las libertades, las garantías individuales y derechos, que se asocian sobre todo a los derechos civiles y políticos, participación, protección de la persona, pero siempre han estado orientados a la convivencia social y política, en nuestra constitución hay un solo derecho social garantizado, esto es que el Estado se compromete a hacerlo cumplir, y cuando le fallan el ciudadano puede recurrir a la justicia para que le cumplan. Junto con el derecho de propiedad es necesario incorporar otros derechos sociales garantizados que son básicos para la persona, me refiero a salud, educación y vivienda, el drama lo conocemos todos, sabemos que tenemos un déficit de 600.000 viviendas.
¿Que propondrá en materia institucional?
En la parte orgánica, que tiene que ver con la distribución del poder de distintas instituciones, hay que velar fundamentalmente por el equilibrio de estas de tal modo que ninguna sea predominante sobre las otras, de tal manera que las libertades y garantías individuales no se vean ahogados por un suprapoder. Eso es lo principal, hay cuestiones de detalles que tienen que estar en las leyes.
¿Y respecto al tema medioambiental?
Con los tiempos que corren también hay que darle un tratamiento especial como derecho al cuidado del medioambiente. En la actual constitución hay un artículo que dice que los chilenos y chilenas tenemos derecho a vivir en un medioambiente sano y libre de contaminación, pero no establece ningún mecanismo por el cual los ciudadanos pueden reclamar que este derecho se cumpla y eso creo que hay que establecerlo en la nueva constitución.
Usted se había referido en otras ocasiones a los delitos ambientales…
No hay que dejar espacio para cuestiones como los delitos ambientales y económicos, la constitución actual establece un principio muy laxo, y el delito ambiental y económico, sobre todo frente a una situación que dice sobre la superviviencia de la especie por el cambio climático…creo que hay que establecer que las leyes deberán sancionarlas con castigo corporal (privación de libertad) y pecunario. No hay delito más condenable que el de la colusión para fijar precios artificialmente, también hay que sancionarlo de manera drástica, porque hacen mucho daño a la vida en sociedad.
¿Qué elemento de la actual constitución le gustaría que se mantuviese?
Hay varios elementos que son positivos, en las cuestiones orgánicas cuando hay controversia entre las cámaras legisladoras se establece la existencia de una comisión mixta como mecanismo para resolver las diferencias entre ambas cámaras. Yo creo que ha sido una cosa útil para agilizar los procesos legislativos y a mi juicio ese tipo de cuestiones habría que mantenerlas. El recurso de protección que puede invocar un ciudadano frente a la justicia frente algo que considera arbitrario, a mi me parece bien. Incluso como está establecido el derecho de propiedad, salvo tal vez un poco de énfasis mayor en la subordinación de esta al interés general con las debidas compensaciones, podría permanecer tal cual está. Pero también hay muchas cosas que cambiar.
¿Qué elemento de la propuesta rechazada debería ser rescatado?
Sin duda, en el tema ambiental las cosas fueron bien tratadas, así como en igualdad de género, también hay que recuperar una reivindicación armoniosa con lo que son los reconocimientos de nuestro pueblos originarios, ajustado a lo que ya hemos suscrito como país como convenio internacional con el artículo 169 de la OIT. Creo que se ha causado un daño a nuestro pueblos originarios que hay que reparar, entonces la consulta indígena es algo que hay que mantener de acuerdo a la OIT, que es que cada país determina cómo realiza la consulta indígena, pero es de la soberanía del propio país el ver cómo se hace, naturalmente si usted va a afectar bienes donde está radicada parte de nuestra población originaria tiene que preguntarles la opinión acerca de las consecuencias que ellos estiman para su vida y su cultura.
En materia electoral ¿Qué efectos cree que tendrá el voto obligatorio para estos comicios?
El voto obligatorio para el plebiscito del 4 de septiembre claramente favoreció al rechazo, pero ojalá no conduzca a nadie a creer que tiene clavada la rueda de la fortuna y que ese mundo abstencionista que se incorporó a la votación va a tener siempre la misma dirección en sus decisiones electorales. Yo creo que más bien ellos van a jugar favor de una solución constitucional equilibrada, integradora, armoniosa, que haga sentir que la constitución es de todos los chilenos y al mismo tiempo no es de nadie (…) donde todas las fuerzas tienen la posibilidad de llevar adelante como políticas públicas la realización de los programas que le ofrecen al pueblo chileno.
¿Cree que el Partido Socialista pueda perder a votantes moderados al ir en la misma lista que el Frente Amplio y el Partido Comunista?
Los chilenos nos conocen a los socialistas hace 90 años, saben que nuestra vocación siempre ha sido la del cambio social en dirección a la justicia, pero con los métodos de la democracia y no buscando la alteración de la vida. Lo que ocurrió el 73 fue consecuencia de lo que se vivía en el mundo, de la polarización, sería un poco largo de describir, pero el programa de Allende primero se proponía hacer los cambios en democracia.
Somos uno de los países que tienen una vida democrática más larga de la historia junto a Estados Unidos, es parte del aire que respiramos, todos sabemos que cuando hay una dificultad la vamos a ir a resolver a las urnas, sea una elección, sea en un plebiscito, pero lo que ha ocurrido en el golpe del 73 fue una cuestión completamente excepcional.
¿Y sobre la alianza?
Si los socialistas estamos en esta alianza con el Frente Amplio y el Partido Comunista, nosotros vamos a tratar de que predomine nuestro sello, nosotros creemos que la democracia es el camino para resolver los problemas y que la democracia es el fin que perseguimos, no hay caminos más cortos, no hay atajos, la democracia no pasa por manifestaciones en plaza Italia o plaza dignidad, la democracia pasa por la expresión de las mayorías y las mayorías se expresan silenciosamente en las urnas, en el secreto del voto y eso es lo que nosotros vamos a tratar de hacer predominar, por lo que esperamos contribuir al reencuentro nacional en una manera de vivir más respetuosa entre todos.