¿Creías que las vacaciones iban a durar para siempre? Todo lo bueno tiene que acabar y, para muchos, la vuelta de las vacaciones podría generar estados de tristeza, angustia, irritabilidad, falta de sueño e inquietud, entre otros síntomas. A esto se le llama síndrome postvacacional y, a pesar de que no existen estadísticas nacionales, el Observatorio de Recursos Humanos de España estima que cerca del 37% de su población lo padece.
La ansiedad por volver a la rutina tiene varias causas, tanto internas como externas. Los cambios de hábitos en términos de horarios y comidas, además de la presión e insatisfacción que puede causar la labor que se desarrolla, generan síntomas que suelen asemejarse a una depresión clínica. No obstante, los expertos médicos señalan que este síndrome es temporal y puede superarse a través de simples acciones cotidianas.
En primer lugar, se debe volver al trabajo con una actitud positiva. Quizás es fácil decirlo, pero es necesario pensar que es un día laboral como cualquier otro. Aprovecha los primeros días para proponerte nuevas metas profesionales, ordenar y planificar el trabajo y establecer una línea de acción consciente y que se pueda cumplir para esa primera semana. Asimismo, puedes aprovechar de reordenar tu puesto de trabajo, para que la vuelta no se traduzca simplemente en retomar la monotonía.
También es necesario no olvidar el descanso y la actividad física. Durante los primeros días, trata de no comprometerte para otro tipo de actividades posterior al trabajo, para que puedas descansar y acostarte más temprano. De esa forma, ayudarás a tu cuerpo a volver a su ciclo de sueño normal. Tampoco debes olvidar practicar algún deporte que contribuirá a bajar los niveles de estrés que genera la vuelta a las labores cotidianas, sin mencionar los beneficios generales a la salud.
Finalmente, no te auto mediques. Muchas personas creen que consumir sustancias naturales podrían ayudar a generar más ánimo, pero esto puede ser contraproducente si se toman medicamentos de forma periódica, sobre todo en pacientes con enfermedades crónicas.
Si los síntomas de angustia o irritabilidad persisten por más tiempo, deberás consultar a un especialista, ya que puede que estés desarrollando algún tipo de depresión. Lo importante siempre será el autocuidado y tus ganas de volver a sentirte bien.
Paula Molina, Químico farmacéutico de Farmacias Ahumada.