La Fiscalía ha ordenado a la Brigada Investigadora de Delitos Económicos (Bridec) de la PDI solicitar las cartolas bancarias de Virginia Reginato, exalcaldesa de Viña del Mar, correspondientes a los años 2010, 2016, 2017, 2018, 2019 y 2020. Esta medida se inscribe dentro de la investigación por presuntas irregularidades en el pago de indemnizaciones durante su gestión.
La exalcaldesa Virginia Reginato, del partido UDI, se ve enfrentada a una nueva trama judicial tras la solicitud de la fiscalía de revisar sus movimientos bancarios. La indagatoria, iniciada por una querella de la actual alcaldesa Macarena Ripamonti, apunta a un presunto fraude al fisco vinculado a pagos indebidos a exfuncionarios de la Corporación Municipal de Viña del Mar.
Entre los señalados se encuentra Claudio Boisier, exgerente general de la corporación, y otros dos funcionarios, quienes habrían recibido finiquitos millonarios por terminaciones de contrato cuestionables. La investigación revela que estos desembolsos podrían haber ascendido a más de $155 millones de pesos.
Según lo constatado por el CIPER, la querella detalla que Boisier, quien después de renunciar a su cargo de gerente general pasó a ser administrador municipal, habría sido uno de los principales beneficiarios de estos pagos. También se menciona a Patricia Colarte Troncoso, exDirectora de Educación de la Corporación, y Rodrigo Macuada Murray, exadministrador del cementerio Santa Inés, como otros posibles involucrados.
Este caso se complica para Reginato, quien ya fue destituida de su cargo como concejala en 2021 y se le prohibió ocupar cargos públicos durante cinco años debido a un notable abandono de deberes que resultó en un déficit millonario en las arcas municipales.