La cereza chilena se ha posicionado en los últimos años como el producto estrella del campo chileno, copando miles de hectáreas a lo largo del país para satisfacer a un gigante: China. Sin embargo, en los últimos días un sorpresivo terremoto remeció los cimientos de la industria, llegaron oscuros pronósticos y se activaron movimientos para analizar el futuro del sector.
Lo que se esperaba que fuese una temporada récord, con un impresionante crecimiento del 59% de las exportaciones al enorme mercado chino que ve en la cereza un producto de alto simbolismo de prosperidad, afecto y confianza para celebrar el Año Nuevo chino, ha terminado siendo un duro «baño de realidad», dicen desde la industria.
Es que el exceso de oferta saturó el mercado y provocó un desplome en los precios de un 50%, lo que no estaba en los pronosticos de nadie.
La situación encendió todas las alarmas de la industria embajadora de Chile en Asia.
Antonio Walker, presidente de la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) comentó que. pese a que aún es temprano para sacar conclusiones -debido a que falta la fecha más importante: el Año Nuevo Chino a fines de este mes-, la situación «ha generado que las ventas estén muy por debajo de las expectativas que teníamos para este año» y cree que este problema generará un «punto de inflexión» que gatillará un importante rebaraje en la industria.