La advertencia hecha los últimos días por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de que «muy pronto» comenzarán los ataques contra carteles del narcotráfico dentro del territorio venezolano, mantiene en vilo a toda una región, mientras en Caracas aseguran que están preparados para enfrentar un posible ataque en medio de un escenario que día a día se ha tornado más tenso.
«En tierra es mucho más fácil. Conocemos las rutas que toman. Lo sabemos todo sobre ellos. Sabemos dónde viven. Sabemos dónde viven los malos. Y vamos a empezar con eso también muy pronto», dijo el Mandatario estadounidense el martes, durante una reunión con su gabinete en la Casa Blanca.
Con todo, y considerando el amplio despliegue militar en la zona, los expertos en defensa coinciden en que la gran duda es qué blancos venezolanos consideraría golpear EE.UU., según El Mercurio. «La fuerza es insuficiente para una invasión terrestre, pero plenamente adecuada para una campaña aérea y de misiles», explicó al mismo medio Mark Cancian, coronel retirado del Cuerpo de Marines de EE.UU. y asesor principal del Centro de Estudios Estratégicos e Internacionales (CSIS).
De acuerdo con el especialista, hay dos posibles conjuntos de objetivos: los carteles narco y el régimen de Nicolás Maduro. En el primer caso, los ataques se concentrarían «en instalaciones de producción, astilleros, depósitos portuarios, aeródromos y en su liderazgo».
Si los ataques fueran contra el régimen de Maduro, estos apuntarían a lugares clave como la sede del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el Ministerio de Defensa y las fuerzas de seguridad interna. «Podrían intentar atacar al propio liderazgo, aunque esto es difícil. En cualquier caso, es probable que EE.UU. ataque las unidades de defensa aérea», explicó Cancian.




















